Casa Fontequeiroso

Me encantó, la rural es maravillosa, cerca de la playa, y un silencio maravilloso; no hay nada que te moleste por la noche. Además fuimos con dos perros mayores y tuvimos un pequeño jardín a nuestra entera disposición. Fue maravilloso, quedamos encantados, y además, no hay que olvidarse del desayuno y la cena. Sensacional, todo de la huerta, estaba magnífico.

Todo fue perfecto. El entorno idílico para desconectar y relajarse en plena naturaleza gallega. El trato cercano y familiar. La habitación y todo el hotel rural nos parecieron preciosos, muy bien cuidado hasta el último detalle. El desayuno y la cena nos parecieron abundantes y, sobre todo, riquísimos. Volveremos en cuanto podamos.

Como ya he puesto una reseña y me quedé corto, tengo que añadir que todos las veces que hemos estado, a pesar de la excepcional atención, cenas, desayunos casi como banquetes , habitaciones,etc. Lo que más nos ha impactado siempre ha sido la excepcional atención, el desplazarse en sus coches a recogerte ante cualquier incidencia, no solo por parte de Carmen, a la que le hemos cogido un cariño especial, sino también por parte del el grupo humano que atiende la casa, su pareja, Paula un encanto de niña, con esa sonrisa fresca y juvenil, así cómo todos los demás, eso es lo grandioso de ese lugar.

Maravilloso lugar con encanto. Fuimos 4 adultos que nos hospedamos una noche haciendo el camino de los faros. A pesar de que estaba un poco apartado de la ruta, Carmen, encantadora, nos acercó en coche. Las habitaciones super bonitas, limpias. Cuidado hasta el último detalle de la decoración; alegre, moderna, contrastando con el idílico paisaje rural de fondo. Al estar apartado, que por otra parte, el descanso y la tranquilidad es máxima, ella te prepara la cena y el desayuno. Merece muchísimo la pena, porque se nota que lo hacen con mucho cariño, cocinan estupendamente, y están muy atentas de que estés a gusto. Todo casero y con productos de calidad. Si no volvemos, lo recomendamos siempre !!

Un lugar tranquilo dónde desconectar y descansar. Playa a 2km, puedes ir caminando, vistas muy bonitas. La atención por parte de Carmen fue excelente, muy atenta en todo momento, nos hizo sentir cómo en casa, fuimos con dos perretes y la acogida fue estupenda. El desayuno espectacular no faltaba detalle, pan de la zona, dulces, fruta, jamón y queso, zumo de naranja, ofrecían también yogurt y huevos. Recomendable 100%. Repetiremos seguro.

El sitio es de 10. Un entorno rodeada de carballos, pinos y vaquitas.
El trato de Carmen una pasada llegamos cansados de ir en moto y nos ofreció algo de beber. Que eso en casi ningún sitio hacen. Es de agradecer.
Los dormitorios son muy vintage y preciosos. Y la cama súper cómoda.
Y el desayuno.. ESPECTACULAR!!!!!!
SIN DUDA REPETIREMOS!!!

Lo mejor para relajarse y disfrutar. Un lugar de lo mas acogedor y familiar, te hacen sentir como en casa. Soy fan de la gente bonita,esa que toca tu corazón y Carmen y su personal lo son. Mil gracias.
PD. El desayuno exquisito

La atenciòn es excelente, el desayuno abundante y muy bueno y la ubicaciòn es perfecta para moverte tanto a playas como a interior. Las habitaciones también son còmodas y la casa en general es muy acogedora.