Hostal Residencia Buenos Aires

Viajaba de Órense a Madrid y me encontré indispuesto y decidí parar a dormir en el primer sitio que viese….
Genial!! la señora (la dueña)muy amable y muy buena persona me trajo una botella de agua caliente para poner en los pies( me recordó a mi infancia), la habitación estaba muy bien, dormí muy a gusto. Un sitio confortable. Enhorabuena!!

Mi amiga y yo decidimos irnos a los carnavales a Xinzo y no encontrábamos donde dormir, los dueños de este hostal fueron súper amables y nos dieron una habitación espectacular.
He de decir que por los que comentarios que vimos de este hostal teníamos bastante miedo e incluso compramos un producto para matar cucarachas, pero la verdad es que fue un gasto de dinero la habitación estaba en perfectas condiciones y súper limpia. Es cierto que la habitación era un poco fría pero se daba dormido en ella, además la calefacción funcionaba y había buenos edredones.

La verdad es que para pasar la noche estuvo de maravilla.

Me sirvieron perfectamente

2 horas perdidas en un viaje, el restaurante vacío y el servicio lento no lo siguiente, te canta la carta e intenta venderte los platos caros, no tienen carta de precios, te cobran lo que quieren y no puedes ni ver si te están cobrando de más, el pan del día anterior y precios desproporcionados para la mala calidad.
En fin....un bocata en la gasolinera de enfrente es más rentable

Solamente comí en el restaurante, y debo decir que el trato fue muy agradable, mi plato favorito, la pechuga de pollo, muy bien hecha. Ha sido todo un acierto, y eso que entré de casualidad.

Una carta para picar y otra para cenar. Nos fuimos a la de cenar, y les felicito, buena calidad, buen producto, buena cocina, buen servicio, rápidos y eficientes. Y cenando en la terraza, aprovechando las buenas temperaturas del verano. Para los amantes de los maridajes, también hay, y con muy buena pinta. Los postres merecen también mención, ricos, ricos.

Lamentable.
Nuestra estancia en este hostal ,si así se le puede llamar , se resume en:
Cucarachas y una paloma muerta colgada en el patio interior.
Gente de nuestro grupo durmiendo en una cocina.
Sabanas usadas.
Existe un ascensor pero no sé puede usar.
Agua sucia y habitaciones sin calefacción.
Personal nada profesional y super desatentos.
Baños compartidos para 12 personas y con papel higiénico reutilizado.
Por veinte euros duermes mejor en el coche.

Fatal el servicio.Llegamos a las 15:00 con el comedor practicamente vacio y esperamos 50 minutos para que nos pusieran el primer plato que eran callos,estaban buenos pero muy escasos.Del segundo plato vamos,churrasco de muy baja calidad y tambien escaso.La camarera yo nosé si es que no se organizan entre ella y la cocina pero fatal.Para colmo.nos cobran 2€ mas por una chuleta que supuestamente entraba en el menu.