Hotel Real Castellón

No había ni escobilla del water. Cambiamos habitación porque (LITERALMENTE) olía a pies y cuando nos cambiamos vimos que en la otra echaban ambientador. Habitaciones muy pequeñas. Terrible, de los peores hoteles (hoteles¿?) en los cuales he estado en mi vida.

hotel con habitaciones antiguas no, lo siguiente. La que nos tocó no podías abrir el armario porque la cama estaba tan pegada que no permitía hacerlo.El aire acondicionado de los años 60. Lo único bueno la limpieza y la ubicación, en el mismo centro de Castellón. Está claro que para repetir no es

Sales por la puerta y en 2 min estás en el centro, eso es genial.
No sé cómo serán las demás habitaciones pero la que nos tocó era enana y hacía un calor horrible. El aire acondicionado debía de tener 40 años aprox.
Para ser un hotel de 2** en pleno centro no está mal.

Nos equivocamos de planta y pudimos abrir la habitación de otra persona, lo que quiere decir que otros también podrían haber abierto la nuestra. Nos pareció surrealista.
Aunque está en el centro, es un hotel viejo.

Atención correcta, ascensor, camas individuales un poco duras pero son irregularidades. Relación calidad-precio muy bien. Lo unico realmente peligroso son las mesitas en munta puestas al lado de la cama a la altura de la cara.

Pagas antes de entrar en la habitación y no me extraña porque de verlo antes de pagar saldrías corriendo. No se cómo tiene 2 estrellas. El pasillo que te lleva a las habitaciones da miedo. En la primera planta según entras al ”recibidor" por llamarlo de alguna manera te encuentras un microondas sucio, una nevera sucia llena de cosas abiertas, hasta un carro del super vacío. Según avanzas por el pasillo hay cristaleras en las que ves una especie de patio cerrado en obras sucio y cuando llegas por fin a tu habitación huele a cerrado y a humedad, al tumbarte en el colchón te vas hacia el centro de la cama hundido, la cortina de la ducha no llega al suelo y se empapa todo y el aire acondicionado es taaaaaaaaan antiguo que daba hasta miedo encender. Había una única ventana al patio interior que como la dejes abierta da la sensación de que te pueden entrar por ahí a la noche los otros huéspedes. El armario ni lo abrimos por miedo. Nos lo tomamos a risa, pero vamos, no repetiría jamás. El checkout es dejar una llave en un macetero de la recepción y marcharte, ni si quiera hay nadie. En el checkin esperas a que el recepcionista que al parecer vive o anda por ahí te abra y es un señor de pocas palabras, seco y que habla bajo.

Un hotel muy justito. Muy buena ubicación. Habitaciones pequeñas y algo viejillas, hay que reformar mucho. Está limpio, eso sí

Habitación muy pequeña, parece del siglo XIX, los armarios olían a cerrado y viejo como mi abuela, el baño muy cutre, la tele con muy mala señal, el aire acondicionado súper ruidoso, parecía una hormigonera, lo único decente es la comodidad de la cama
La estancia fue horrible, ruidos por doquier y escándalos de los demás clientes, riñas en los pasillos durante toda la noche, no pudimos dormir
No me moleste ni en limpiar el agua que cayó de la ducha
No vuelvo ni de coña
El precio es más de lo que vale realmente