Hotel & Restaurant Beniali

El restaurante me ha encantado. Pedimos el menú, y todos los platos tienen un toque especial. Los entrantes, todos muy buenos. Pero destacó la tempura de sepia (fantástica)No me ha parecido caro.Volveremos seguro, porque el pueblo y el entorno son preciosos

Fatal todo. Fuimos un lunes 16 de agosto. La mitad de las cosas que había en la carta no estaban. Según los camareros porque era lunes y venían del fin de semana. Comimos en la terraza y no se dignaron ni a poner mantel. Las patatas fritas eran del día anterior o por lo menos lo parecían. Sacaron la mitad de los postres y luego se olvidaron de los otros. Postres muy malos. Lo que ponía que tenían unos postres venían cambiados los ingredientes. Un desastre. Los camareros se notba que no tenían experiencia.

Justito para lo que cuesta, aunque la sepia estaba muy buena. El problema ha sido que tras sacar los 3 entrantes del menú de 25,50€ nos sacan los segundos. Le comentamos con el camarero que apenas caben en la mesa y que los primeros están sin tocar. Tras lo cual se lleva los platos y nos los saca al rato recalentados.. El solomillo ya estaba pasado de cocción, una lástima.

Por otro lado, en cocina han estado casi toda la comida con la música a toda leche.

Nos esperábamos algo más la verdad!

Nos ha sorprendido muy gratamente este restaurante. Local muy acogedor y bien decorado.
La cocina excelente y muy buena atención por parte de Javi. Supo servir al grupo con educación y cordialidad.
Tanto entrantes como principales, muy bien elaborados. Especial atención a los postres que no les falta "de ná"....

Camareros sin experiencia, abriendo botellas de vino como si estuviesen en su casa, patatas fritas de ayer servidas hoy, arroz con sabor a quemado. No tienen en cuenta los niños a la hora de hacer la reserva, ya que cuando llegamos no estaba la mesa montada para ellos, como si no existieran.

Comimos hace un año y muy bien. Pero volvimos el domingo pasado y nada que ver.
Después de los entrantes, nos hicieron esperar 45 minutos para que llegarán los platos principales, (algunos) llegaron primero los de bacalao y más tarde aun, las carnes. Comida buena pero no se puede tardar tanto. Estaba elegido el plato de cada uno en la reserva.

En pleno Parque Natural de la Sierra de Espadán, en la provincia de Castellón, se encuentra este pequeño y maravilloso hotel. Cuenta con tres estrellas, pero su encanto no tiene valor. Las habitaciones son amplias y luminosas, las camas cómodas, el restaurante una delicia y la atención, amabilidad y profesionalidad del personal es insuperable. Además, el pueblo atesora una belleza y un cuidado indescriptible.

Solo estuvimos en el restaurante, menú de 25,50 del que no se podía elegir, faltaba más de la mitad de platos, en los segundos la única carne era cordero, la calidad bastante regular para el precio. Decepcionados porque esperabamos mucho mas