Golosilandia

Mal, muy mal. Como siempre.
La dueña, o al menos la persona que siempre está en ese mostrador, es realmente desagradable al atender al público.
Se te quitan las ganas de entrar nuevamente en este sitio y, sólo, lo he visitado en dos o tre ocasiones en los 20 años que llevo residiendo en El Portil.
Una lastimo, realmente.
Lo siento, si bien, así ha sido mi experiencia en todas las ocasiones que he acudido aquí.

Golosinas de todo tipo