Un lugar mágico, la finca cuida todos los detalles para sus huéspedes , las instalaciones super confortables, elegancia con exquisitez. Un equipo humano formidable la atención del personal en general es excelente y muy profesional. La comida espectacular y los vinos exquisitos,Un lugar entrañable para repetir.
Fco. Javier Gallardo2 años atrás
Hemos compartido una magnífica experiencia rodeados de música y naturaleza. Ambiente suavemente agradable, sin estridencias. Dan ganas de aislarse años allí . Su único pero, el acceso puede ser aún un inconveniente para muchas personas.
C R S2 años atrás
Bueno, inicialmente comentar que no soy de escribir reseñas en medios porque las valoraciones son muy subjetivas, no obstante, en esta ocasión voy a dejar constancia de mi reciente experiencia puesto que nos hemos llevado una decepción que a continuación detallo: Gran parte de promoción de la finca es centrado en el turismo ecuestre y las actividades relacionadas con los caballos pero lamentablemente lo prometido antes de reservar no es lo cumplido cuando estás allí. La falta de comunicación, gestión e información entre los responsables de reservas y los responsables de las actividades ecuestres son totalmente deficientes. Hay cierto personal que no debería estar de cara a los huéspedes y no todo el mundo es válido para esta función. Algunas faltas de limpieza en las habitaciones, toallas etc. Instalaciones, comida y servicios están muy centrados al huesped extranjero perdiendo totalmente el encanto y el saber hacer de la tierra donde esta situada la finca. En definitiva y resumiendo mi estancia, podría decir que la finca está en un enclave privilegiado en la Sierra de Cadiz y mantienen una filosofía y proyectos bonitos para la zona pero si la idea es el vivir el caballo no es el sitio adecuado y no lo recomendaría como opción.
Equus Info2 años atrás
Es el plan perfecto para los amantes de la naturaleza , alta gastronomía y los caballos. El lugar excelente y el trato de su equipo aún más. Me perdería allí un mes 😊
Ana Belen Baute2 años atrás
¡¡Lugar maravilloso!! Cada esquina, cada recoveco tiene un encanto particular, grandes anfitriones
Alois Heigl2 años atrás
Es algo mágico! Todo es una experiencia increíble dentro y fuera. La comida, el aire, los caballos lucitanos, la atención... vale la pena! Es un regalo para el cuerpo y el alma.
Clara lozano aviles2 años atrás
Un sitio mágico, todo está cuidado y medido al detalle. La comida es un espectáculo de sabor y originalidad. No hay mucho sitios como este en el mundo. Enhorabuena al equipo que forma La Donaira, se nota el esfuerzo y dedicación que le ponen a todo para hacer que tu estancia allí sea de 10!
Miguel Tobal Douek2 años atrás
El enclave divino el hotel muy lindo la atencion buena ! La comida malisima! No entendi que haya in chef sueco otro austriaco y una pastelera ! No se entiende que no habia comida desde las 13 hs hasta la hora de cenar fuimos con 1 niño de 11 anos y no habia comida. Ademas era todo muy tacaño a la hora de servir !
Gran parte de promoción de la finca es centrado en el turismo ecuestre y las actividades relacionadas con los caballos pero lamentablemente lo prometido antes de reservar no es lo cumplido cuando estás allí. La falta de comunicación, gestión e información entre los responsables de reservas y los responsables de las actividades ecuestres son totalmente deficientes.
Hay cierto personal que no debería estar de cara a los huéspedes y no todo el mundo es válido para esta función.
Algunas faltas de limpieza en las habitaciones, toallas etc.
Instalaciones, comida y servicios están muy centrados al huesped extranjero perdiendo totalmente el encanto y el saber hacer de la tierra donde esta situada la finca.
En definitiva y resumiendo mi estancia, podría decir que la finca está en un enclave privilegiado en la Sierra de Cadiz y mantienen una filosofía y proyectos bonitos para la zona pero si la idea es el vivir el caballo no es el sitio adecuado y no lo recomendaría como opción.
Todo es una experiencia increíble dentro y fuera. La comida, el aire, los caballos lucitanos, la atención... vale la pena! Es un regalo para el cuerpo y el alma.