Mesón A Brea

Comimos el menú del peregrino, muy económico y abundante. Por solo 11 euros comí un potaje de lentejas buenísimo, y de segundo bacalao a la gallega. Una botella de vino y los postres no quedaron atrás, lo que más nos gustó fue el queso con membrillo. Otra persona del equipo se pidió el entrecot y estaba exquisito. Muy recomendable el sitio.

Comida muy buena, servicio pésimo.

Fuimos a este mesón por recomendación de un amigo (con el que fuimos a comer), nos avisó de que la comida estaba buenísima pero que eran algo lentos y, efectivamente, la comida estaba buenísima pero el servicio fue extremadamente lento. Entramos tres personas con reserva a las 14:30, nos fuimos sobre las 17:30 y no precisamente por hacer sobremesa, según terminamos de comer pedimos café/infusion y nos fuimos.

Como comentaba, llegamos los tres a las 14:30, esperamos 10 minutillos a ser atendidos y nos sentaron en la mesa que ya tenían preparada.
Estuvimos durante casi 1 hora (55 mins) viendo cómo pasaban camareros que ni nos miraban, ni nos ofrecían bebida, ni nos daban la carta.
Finalmente uno de esos camareros vino a preguntarnos si estábamos esperando a ser atendidos, le dijimos que sí y le dijimos que ya sabiamos lo que queríamos (gracias a nuestro amigo sabíamos qué había en la carta y qué pedir, además no estábamos dispuestos a esperar más). El camarero fue a por un bloc de notas y anotó la comanda al momento.
Nos ofrecieron pan y bebida y nos tuvieron 40 minutos esperando a que llegaran los primeros platos.
Tras comer tranquilamente estos primeros platos esperamos otros 30 minutos para que llegaran los siguientes (lo que tardamos en comer + 30 minutos). Para entonces ya el comedor se veía medio vacío.
En todo este proceso de espera vimos cómo había dos familias que fueron a quejarse, incluso a decir que se iban a marchar si tenían que esperar más, a lo que los dueños del restaurante les instaron a irse de malas formas.

Es un restaurante en medio del camino de Santiago, donde paran muchos peregrinos, tienen un menú peregrino y, por lo que he leído con los menús se apañan bien, pero aún así es una vergüenza que a personas con reserva se les haga esperar una hora para dar la carta o la bebida. Se veia caos y desorganización, los camareros estresados y, por consiguiente, no muy agradables. Aunque a nosotros nos sirvieron bien una vez nos tocó ser atendidos.

En cuanto a la comida, estuvo muy rica. Pedimos langostinos, chipirones (los primeros platos que llegaron), raxo, criollo, costilla y chuleta (los siguientes platos).

En cuanto a calidad de la comida/precio estaba insuperable, pero la calidad del servicio bastante pésima.
Pagamos 62,90€ por todo lo mencionado más agua.

Con un poco más de organización el servicio y la sensación de profesionalidad podría mejora. No pongo peor nota por lo buena que estaba la comida y el precio pero las larga esperas deben ser algo habitual en este restaurante y, a pesar de eso, nuestro amigo, el que había ido más veces a este restaurante, se sorprendió de todo lo que tuvimos que esperar.

Mesón con raciones buenísimas, a pocos kilómetros de Palas de Rei. Tiene una terraza estupenda y un interior grande. Allí comimos el segundo mejor pulpo y las mejores zamburiñas de todo el Camino de Santiago. Nos atendieron súper rápido y los camareros fueron muy majos ya que llegábamos reventadas sin haber comido desde Portomarín. Sin duda, una de la mejores cocinas que probamos. Absolutamente recomendable.

Pedimos el menú del día y salimos muy contentos. Buena relación calidad/cantidad/precio (13€). Todo lo que pedimos estaba buenísimo: lasaña, ensalada, empanada de atún, bacalao, albóndigas, lacón, tarta de queso y tarta de galleta y chocolate.
Además, el sitio es muy bonito. Vale la pena.

Reservamos para un grupo de seis. Comimos el menú que estaba muy rico y fue económico.
De menú comimos arroz o callos y ternera asada que, por cierto, estaba muy rica. El postre fue queso con membrillo, tarta de la abuela y tarta de queso. Nos sirvieron muy rápido y fueron amables. El mesón está en el Camino de Santiago. Repetiremos!!

Un lugar perfecto para comer en Palas (y de los pocos que hay que abren un sábado en invierno). La comida casera y de sabor espectacular, cantidades muy abundantes y a buen precio en fin de semana ( adjunto ticket). Lo mejor para mí, la rapidez del personal y el trato hacia el cliente. La próxima vez que pase por allí repito seguro

El mejor lugar que he comido en Galicia calidad - precio ESPECTACULAR! Menú del día de primero huevos al plato de segundo ternera. Aún me queda 2km para llegar al
Hostal y no se como voy a poder ir si no puedo moverme de lo bien que he comido. El Camarero buena recomendación y muy atento. Volvería a repetir sin pensarlo.

Un buen sitio para comer a la brasa por un precio muy razonable. Le daría 5 estrellas de no ser por el tiempo de espera, ya que nos tuvieron esperando 45 minutos para tomarnos la comanda y otra media hora hasta que pudimos empezar a comer algo. Quizá en otro momento la rapidez de servicio mejore.