Monasterio de Santa María de Monfero

El conjunto, en mi opinión, es de una magnitud impresionante, su construcción se inició en 1134 y se desalojó en 1820, tal como se aprecia en un cartel muy deteriorado por actos vandálicos, pese a ello la estructura que es posible ver aparenta ser robusta.
Es una pena la situación actual, ya que no parece estar visitable, pero en una vista realizada hace algunos años, en fase de restauración, era posible acceder a casi todo el recinto.

Precioso monasterio con una original fachada en ajedrez y rodeado de naturaleza. Actualmente se pueden visitar la iglesia, la sacristía y un par de estancias porque el resto está muy estropeado, pero merece la pena. A destacar también la atención de la encargada de turismo que fue encantadora.

Un sitio precioso y de parada obligatoria sobretodo si admiras la arquitectura. Es una pena cómo está conservado, con humedades y algunas grietas. Ojalá en un futuro sea restaurado y pueda ser visitable parte del monasterio.

Precioso monasterio en el monte. A excepción de la iglesia, el resto del conjunto monasterial está muy deteriorado y no se permite visitar. Pero merece la pena (y mucho) acercarse a visitar el conjunto arquitectónico y sus alrededores. No esperaba ver este patrimonio entre las montañas.

La iglesia es impresionantemente preciosa!

Aunque no pude entrar,su fachada es impresionante,como el paraje donde se encuentra. Es una pena que no se rehabilite. Podía ser un Parador estupendo como el de San Esteban . Tiene cerca muchos sitios preciosos que visitar como las Fragas del Eume

Desde fuera ya se ve lo que después vas a encontrarte dentro, que está abandonado. Una pena que en algún momento se gustasen fondos europeos para que al final sea un monasterio comido por la maleza. Lo único visitable es la iglesia donde casi nada luce excepto la cúpula y las tumbas, por lo demás es fría y humeda y oscura. Eso sí, la mujer que está a cargo de las visitas es muy amable y nos explicó todo muy bien

Está muy abandonado. Desgraciadamente no pudimos visitar el Interior. Del exterior solamente nos podemos deleitar con la fachada principal, impresiona la altura. En los laterales solo podemos ver la grandiosidad que el algún tiempo tenía el monasterio. Un poco antes de llegar hay un bar y unas casitas alrededor creando una aldea que le da la vida que ya no posee.

Impresionante hallazgo en las estribaciones del Parque Natural de las Fragas del Eume, un conjunto monumental, con mucha historia, no voy a valorar el estado en que se encuentra, pero por la vocación de la persona que nos atendió, imagino que está en proceso su cuidado para su conservación, es una lástima que no esté el retablo en su sitio, pero con semejante estructura merece que Patrimonio la cuide y preserve.