Según la tradición, si los peregrinos que no podían continuar su camino a Santiago de Compostela, por causas de fuerza mayor, tomaban la comunión de rodillas, en los escalones de la puerta, gozaban de las mismas perdonanzas y prerrogativas, que si lo hacían en la puerta del perdón de la Catedral de Santiago.
La puerta concedía el privilegio de ganar el jubileo a los peregrinos enfermos (que, por aquellos tiempos, entiendo, deberían ser bastantenumerosos).
Jorge Sánchez2 años atrás
Bellísima iglesia románica. Su interior de una delicia simple que atrapa. El cristo restaurado de una gran belleza. La puerta del Perdón hermosamente románica.
La puerta concedía el privilegio de ganar el jubileo a los peregrinos enfermos (que, por aquellos tiempos, entiendo, deberían ser bastantenumerosos).