Cines Babel

..... Genial la gran posibilidad única, que nos ofrece los Cines Babel... El "festival de cines del Mediterráneo" se muestra diverso y muy atractivo... La muestra internacional, como son todas las películas extranjeras, amplia las miras y los conceptos del vivir "la buena vida" (La Belle Epoque).

Un lugar indicado para todo amante del cine. Tienen una cartelera con estrenos recientes no tan comerciales.

Las funciones después de las 10pm cuestan un poco menos y se conoce como "La hora del espectador".

Te entregan una cartilla donde te marcan cada vez que compras una entrada. La octava vez es gratis

Salas pequeñas e íntimas, buen surtido de películas cada semana y muy bien precio si aprovechas las ofertas, los descuentos, día del espectador o el último pase donde precio entrada reducida a 4€! Esta muy limpio, dispone de muchos aseos y caferería. No se permite comer nada ni beber dentro por lo que lo agradezco. Se evita el ruido. Muy recomendable para ver documentales, películas rescatadas, cine, óperas, etc.

Cines Babel ofrece películas en versión original desde independientes a producciones importante en un local agradable. Destacar que las localidades sin amplias y cómodas. También podemos cenar o tomar una copa en su cafetería bien servida y con precios adecuados.

Cine de salas pequeñas, siempre en VOSE. Cine de autor. Películas muy interesantes. El miércoles es el día del espectador, entradas a 3,90 euros, y todos los días, la última sesión cuesta 4 euros. Entradas no numeradas. No se permite comer ni beber, lo cual se agradece Hay también cineclub.

Me encanta el lugar porque tienen una cafetería donde se puede almorzar, cenar, merendar mientras esperas para ingresar al cine.
La parte del cine está muy limpio, obviamente no es grande, no se puede comer dentro pero se disfruta de las películas muy bien.

Cines donde se ven las mejores carotas del tinglado de los casados castrados... Carmen es una taquillera espectacular. La moción es extremadamente lenta...

Es el único cine en versión original de Valencia y se nota que tienen que hacer malabarismos para sobrevivir. Son unos héroes que mantienen unos cines que frecuento mucho pese a que no me quedan muy cerca. Es fantástico que bajen el precio en la última semana de proyección de las películas y garantizan acceso prácticamente a todos los bolsillos. No permiten comer dentro de las salas evitando problemas de ruidos. Las salas son pequeñas, pero es envidiable el trabajo que se nota detrás para mantener unas salas antiguas en las mejores condiciones. ¡Bravo!