Museo del Vino

Fui con la visita conjunta al castillo, realmente no nos dieron ninguna explicación. Supe de los códigos qr porque lo identifique en los stand pero no nos dijeron nada. Tal vez mejore la puntuación cuando lo haga con la cata de vino!
No obstante, lo que más me gusta fue descubrir los olores de los vinos en un stand que tienen para ello.

Curioso museo. Muy moderno y con pocas piezas históricas. La información del vino es muy amplia y detallada. Tiene dos planteas

Gran cata con José Antonio, aprendimos bastante, profesional y cercano, el museo está genial y completisimo podrías pasar el día entero leyendo y aprendiendo, es un paraíso para los amantes del vino.
Como única pega es el aparcamiento pero seguro que en breve se resuelve, seguid así equipo.

Museo muy didáctico, ubicado en un bonito castillo, con unas vistas espectaculares, hace un recorrido por la historia del vino en general y nos adentra en las D.O.P de Valladolid. Muchos paneles interactivos con bastante información. Para terminar ofrecen una cata de cuatro vinos de la mano de un sumiller que explica de forma muy amena como realizar la cata. Totalmente recomendable la visita!!!

Hemos visitado el museo del vino, castillo y terminado con la cata.
La diferencia de precio es risible y merece totalmente la pena.
El museo está muy bien explicado, el castillo perfectamente conservado y la cara muy fácil de seguir, con vinos muy interesantes.
Espero volver, porque sé que la exposición de los cuadros de la planta de abajo es temporal y la van cambiando.
Totalmente recomendable.

Realizamos la visita guiada al castillo, el cual nos gustó mucho. La visita al museo del vino también fue muy interesante, pero lo que realmente nos encantó fue la cata dirigida por José Antonio, fue muy didáctica a la par que amena. Fue un placer disfrutar de sus explicaciones.

Ya te puede gustar el vino, porque no sé qué es más decepcionante, si el museo insulso o lo poco que puedes ver del castillo. El patio del castillo está cubierto por maderas para albergar el "museo" y solo puedes visitar dos estancias ambientadas. No esperas mucho y aún así decepciona.

Cogimos visita guiada al castillo y cata de vinos, ambas experiencias muy entretenidas. El guía de la visita lo hizo muy ameno y en la cata nos dieron muchos detalles súper curiosos para tener en cuenta. Por no hablar de los vinos, tanto el Verdejo Rueda como el Ribera estaban buenísimos. Para repetir.