Restaurante Los Arcos

Las mesas estaban bastante separadas. Cosa que se agradece para que no haya tanto ruído.

Comida muy rica, de calidad y buena presentación de los platos.

Atención rápida con visitas constantes de los camareros para retirar las cosas, cambiar de plato y preguntar si faltaba algo.
Eran muy amables, pero presionaban un poco para llevarse el plato ya, jejejej

Se estaba un poco incómodo porque la temperatura del restaurante era algo baja y te quedabas frío.

Menú del día 17€ con muchos primeros, segundos y postres a elegir.

Comida excelente, estaba todo buenísimo. Muy buena atención por parte del personal. Hay que venir siempre con reserva y hecha con tiempo porque se llena rápido.

Solo he ido una vez y se ha convertido en uno de mis sitios favoritos para comer. Comimos 4 tapas y un postre, y quedamos muy satisfechas. Relación calidad-precio increíble. Y el servicio rápido y atento. Volveremos.

Vamos bastante a este sitio a celebrar cosas por el buen trato y la calidad de la comida. Tengo que decir que los camareros de siempre tratan a la gente de forma espectacular,los nuevos don más sequillos. La comida rica aunque el sapito y las gambas al ajillo nos decepcionaron un poco. Lo que más nos molestó fue la prisa en servirnos, dudamos sí tenían otra mesa después. No habíamos acabado el segundo y ya nos querían traer la carta de postres. Nosotros las celebraciones nos gusta tomáenoslas con calma y disfrutar de cada cosa. El resto muy bien, como siempre

Fue un sitio de referencia para tapear para mi, no había vuelto desde el covid Y me entristeció ver que en sus barras ya no tenían los taperos que eran un sueño hecho realidad para los amantes del tapeo, en la actualidad tienen una selección de tapas para tomar en mesas altas en la zona “cafetería”. Todo está muy bien, pero ciertamente ha perdido esa esencia que le caracterizaba, aun así muy recomendable como siempre

Buen lugar para comer. Relación calidad precio correcta. Las cantidades son bastante grandes. Gracias a Javi el camarero por su buena atención y simpatía.

Menú del día con bastantes opciones que es lo que más aprecio de este sitio.
Un acierto el toque del helado de mostaza en la ensalada de ahumados que me pedí de primero. El gallo un poquito pequeño pero en su punto.
Otros comensales quedaron encantados con el cachopo.
Sin duda un lugar al que volver, sin grandes pretensiones pero con una estupenda relación calidad precio. Y el personal encantador.

Es la primera vez que como en este restaurante pero sin duda repetiré.
La atención muy buena y los platos todos muy ricos, nos gustó un poco menos el helado cremoso de tiramisú.