Confitería Martín Lugo S L

Se había convertido en mi pastelería favorita...sin lugar a dudas sus pastas son las mejores de Lugo...pero cuando conoces las manos encargadas de hacerlas entiendes todo... Eternamente agradecida y enamorada de esta pastelería.

Encargue una tarta para una comunion y he de decir que estaba riquisima y super bien decorada. Gracias Miguel por ser tan atento. Todo espectacular, sin duda repetire.

DECEPCIONADA , es la palabra, y eso que siempre compro la tarta de cumpleaños de mi hijo tod@s los años.
Después de pagar 47€.
Me viene deforme por un lado y mal decorada. Para este precio deberían de aplicarse algo más. La misma tarta el año pasado y esta no hay por donde cogerla.
Para hacerlo mal, para eso que no la hagan.

Se pueden encargar tartas sin gluten. Están muy buenas.
Gluten free cakes can be ordered in advance.

La mejor pastelería de Lugo. Producto artesano y de calidad a precio razonable. Gracias!

ERA, SIN LUGAR A DUDAS, MI PASTELERÍA DE CABECERA....hasta hoy.

Tengo un encargo PAGADO! para recoger a partir de las 12:00. Llego a recogerlo y tengo que guardar la cola de 16 personas. Me acerco y digo, "es un encargo ya pagado", me contestan que debo guardar cola igualmente.

Desde siemore en esta pastelería y en otros establecimientos, los encargos van por cola diferente...pues ya no en la pastelería según parece. Muy descontenta, sobre todo por no haberme avisado el día que hice el encargo de que había un cambio en las recogidas.

Pastelería de gran nivel, debe ser la mejor de Lugo capital. Elaboraciones de gran calidad, ricas, muy bien presentadas. Sus pasteles y sus tartas están muy bien, aunque lo último que probé de ellos fueron sus huesos de Santo y un brazo de gitano que estaba espectacular, hacia muchos muchos años que no comía algo tan rico. Me encantó el bizcocho con el que estaba hecho, el relleno de crema pastelera estaba perfecto y la yema tostada que lo cubría genial. Un 10

Muy mal. Fui encargar una tarta y una señora de muy malas formas me dijo que volviese otro día y a ver si me podían hacer lo que yo quería. Ante todo hay que tener buenas maneras y un poco de educación. Por muy buenos que sean los pasteles si tratamos así a la clientela mal vamos. A nosotros por allí no nos vuelven ver. Una pena.