Posada El Trasmerano

La estancia ha sido muy agradable, la atención excepcional de las dueñas de la posada, todo muy limpio, el paisaje una pasada, repetiremos seguro, gracias por todo.

Solo estuvimos una noche. El trato estupendo. El desayuno buenísimo todo muy casero y hecho con mucho esmero, el bizcocho casero de limón es buenísimo. La limpieza excelente, el lugar maravilloso con bonito jardín y bien cuidado, Gracias Virginia y Maria, volveremos !!!

Experiencia para repetir siempre, trato y limpieza de 10, el desayuno fenomenal, buena gente. Muchas gracias por todo chicas!!

La Posada El Trasmerano es un lugar placentero, su jardín con vistas a la montaña un lujo. Es ideal para descansar y tiene cerca muchos pueblos bonitos para visitar. Sus dueñas son un encanto

Estuvimos en una habitación aburdillada, que era muy pequeña y en plena ola de calor, pasamos bastante calor, ya que no tenía aíre acondicionado, solo un ventilador.

Genial. El lugar muy acogedor, muy limpio y el desayuno riquísimo, como si te cuidase mamá en casa. Y de Virginia y Maria, que son las dueñas, ni un pero; son la simpatía personificada, amables, cercanas y divertidas. Volveremos segurisimo, muchas gracias x td chicas!

La ubicación es genial porque está muy bien conectada con la autovía y a cualquiera de los pueblos de Cantabria no se tarda nada y así puedes visitar más zonas. Tienes la playa a 6 minutos de la posada y supermercados. En cuanto a la posada la habitación es muy amplia , la limpieza y desinfección es a diario. La habitación tiene muchas comodidades, es muy espaciosa , una cama muy amplia y el aseo muy completo, secador y bañera con hidromasaje. Nos tocó una habitación con unos ventanales enormes con vistas a la montaña. Y ya por no hablar de los desayunos súper completos, zumo natural, cafés/infusiones, bollería de pastelería, sándwiches, tostadas .... Y por último el trato ha sido magnifico, cuidan cada detalle y muy atentas . Lo recomendaría sin duda y también volvería.

Como siempre que hemos estado, todo fenomenal.
Virginia y María son encantadoras, muy profesionales y preparan unos desayunos deliciosos y caseros.
Súper limpio todo.
Muy recomendable.
REPETIREMOSSSSSSSSS