Oficina de Correos

Servicio lento, lento, leeeeeento. Tanta tecnología y van más lentos que nunca. Si vienes a certificar una carta, echas media mañana para ello, no entiendo que luego reclamen aumento de sueldo, si les pagasen por lentitud se hacían millonarios.

Aqui puedes recoger envios. Enviar paquetes y cartas Tener tu buzon, colaborar con ongs como unicef, enviar dinero y comprar articulos del camino de santiago y colaborar con Once comprando cupones

Servicio, lento y nefasto.horrible se me va la vida cada vez que voy. No me han mandado el email para localizar mi envío, lo pedí en papel y me dijeron por email y luego jamás me llegó. Tuve que llamar para saber el código tardaron un siglo en responderme, con lo fácil que es dar tu localizador en el momento. Me cambiaron el sobre para poner su pegatina cobrándomelo claro. La chica que me atendió estaba como cansada...muy mal la verdad. Eso sí, me ofrecieron lotería,,,

Si fuera posible le daba 0 estrellas.
No son lentos, son desesperantes....
He estado en varias oficinas de Correos pero lo de la de Once de Junio es impresentable.....

Lamentable la espera muy grande y al llegar la hora de recogida del paquete malos modales para decirte la forma de pago

He tenido que hacer varios envíos a través de correos, en todos los casos ha sido un desastre. Tiene unos precios carísimos y un servicio terriblemente malo, en esta última ocasión he contratado el servicio más caro para garantizarme un buen servicio, incluyendo el acuse de recibo para saber cuando llega, no me avisan si ha llegado o no ha llegado, llamo para preguntar y me contesta un robot que tras cinco intentos seguidos de dictarle el número no lo entiende bien. Parece mentira en los tiempos actuales con lo bien que funcionan otras agencias, lo mal que funciona correos.
La recomendación es que si tienen que enviar algo, lo hagan por cualquier otro sistema.

No me gusta, tienen un sistema que llama dependiendo del trámite que vayas ha hacer, de modo que habiendo entrado el primero, te puede tocar que detrás entren dos o tres y les atiendan antes, no es ni medio normal.

Normalmente la atención al público es buena. Sin embargo el temor al virus hace que parte del personal sea un poco más frío y distante (mascarilla y plásticos de separación no deberían eliminar una sonrisa de buenos días). A veces las filas de espera se alargan al exterior. Pero suele haber poco tiempo de espera. En caso de minusvalía te atienden con preferencia, pero depende mucho del responsable de oficina en ese momento y del personal... Lo dicho, a veces el miedo al virus nos hace olvidar que las personas con necesidades especiales, necesitan ayuda más que nunca. Pero la mayoría del personal es atento, rápido, el servicio es bueno y por eso mi valoración positiva.