Restaurante Pepito

Un buen lugar para cualquier tipo de comidas y tapas, tienen variedad y a muy buen precio. Sobre todo en menus diarios. Si pasas por la zona aparcas en la puerta.

Una persona que vive en ese pueblo me recomendó el sitio, aparte de que no cierran nunca....
Todo lo que pedimos estaba bueno, queda a las afueras de Sevilla y si te va de camino o vives en la zona, de seguro lo conoces.
Tienen unos precios brutales, las raciones son correctas y estan bien.

He comido muchas veces con mi familia.muy sencillo y acogedor, buenos artículos y su personal desde hace 40 años extraordinario. Y además esta 3n Camas.Que se puede pedir más. Y QUE CONSTE que no soy de allí.

Lamentablemente no puedo dar una referencia positiva de este local.
No creo que vuelva por allí.
Fui a desayunar antes de ir a unas gestiones en la Oficina Fiscal.
Me lleve el portátil, lo enchufe para dar respaldo a la batería y pedí un desayuno.
En total no estaría allí más de una hora.
Pues cuando ya me tenía que marchar para ir a la cita, literalmente vinieron a levantarme de la mesa, solicitándome que abonará ya las consumiciones (dos cafés y una tostada de jamón, aceite y tomate) diciéndome el camarero que no podía estar con el portátil enchufado, que un ratito si pero no tanto tiempo.
Recogí las cosas, aboné y decidí que no volvería más por allí, la verdad es que me sentí muy mal tratado.
Hacía tiempo que queríamos pasar por allí para probar su cocina un mediodía pero visto lo sucedido no voy a volver a un sitio en el que viene el camarero a decirte que pagues y te recriminar tener enchufado el portátil.
Esta es mi opinión, lógicamente muy personal, pero no me gustó el estilo y el trato recibido y siendo coherente no volveré y, por supuesto, no voy a recomendarlo.

El servicio horrible, nos sentamos a las 14:30, al rato nos piden las bebidas y nos la ponen, intentamos hacer la comanda llamando al camarero y el camarero de mala manera nos dice que está solo, nos da las 15:20 y por fin nos toman nota, hasta las 15:50 nos empiezan a traer la comida(todo esto después decir varias veces que no nos habían servido) y encima después le pedimos un par de platos y nos echan en cara el que no hemos pedido todo junto, para acabar se olvidaron de servir un plato para un comensal, la verdad es que no pienso volver porque el trato al cliente es pésimo, porque encima le decías algo y te respondían mal o se excusaban de mala manera, en fin lo único que salva el pan y los picos y porque teníamos mucha hambre

EXPERIENCIA HORRIBLE. Nos quedamos a comer y para empezar la comida muy cara para lo que es, te obligan a pagar antes de que te llegue la comida y se quedaron con mi vuelta de 50 euros nos quedamos a dormir en el Hotel fueron 45€ y es sitio es asqueroso e antihigiénico el cuarto de baño sucio sin champú ni jabon siquiera para las manos tenían un dispensador y en 3 pulsaciones se gastó. El cristal estaba sucio y con polvo el papel higiénico estaba ya empezado y la habitación con mucho polvo. Para colmo le explico al dueño la situación, y el me habla de manera prepotente y gritándome que llame a la policía que él no me va a enseñar las cámaras todo de locos hasta los clientes de fuera del bar dándome la razón. NO VOLVERÉ tanto el personal como las instalaciones asquerosas.

Comida pésima,el menú de primero un plato pequeño de pimientos asados, y segundo un frito variado, con una acedia y cuatro boquerones apostando,una botella de agua
9 euro,pues es muy caro para la calidad que ponen

Comida fresca, de proximidad, la paella recién hecha, ensaladilla del día, los chocos muy frescos y el secreto a la brasa en su punto, tal como habíamos pedido. El local es muy familiar y acogedor, bien ubicado y con aparcamiento cerca.