Sidrería El Pescador

Ubicación espectacular, en pleno puerto. Calidad muy buena, pero cantidades muy escasas…pedimos medias raciones para probar cosas o poder ir decidiendo, y parecían tapas…Después de quejarnos por la ridícula cantidad el camarero nos invitó a una media de rabas después de haber pedido 2.

Cachopo muy rico, marisco no muy fresco, seguramente congelado pero pasable, buen servicio y buena atención por parte de los camareros

Raciones más bien caras, el servicio del mismo estilo. De los tres que hay juntos , sin duda el peor, no recomendable. Pedimos una fritura de pescado y se la devolvimos, poco fresco y mal hecho,aparte de poca cantidad . Me quisieron clavar una ración cuando pedí media. En resumen,una ruina. Me dijeron unos paisanos que cambió de dueño no hace mucho

Después de leer las primeras reseñas, confirmo totalmente las valoraciones: restaurante que vive de su ubicación atractiva para cualquier turista. Relación calidad-precio ínfima. Fritura de pescado a 32€ que parecía por cantidad casi una tapa. De la calidad no digo nada porque la devolvimos sin probarla a lo que el dueño contesto que "la cantidad es lo normal. Qué quiere que le diga..." En fin, penoso. No volveremos.

La ubicación buena,en el puerto. La comida calidad-precio alto, pedimos una .bandeja de fritura y era penosa, la bandeja grandisima para el contenido en una más pequeña igual hubiera disimulado: 8 sardinas de las pequeñas, 4 chipirones, unas anillas de calamar y unos rebozados de gamba que es todo rebozado 32€, una pena porque habíamos estado más veces pidiendo tapas y habíamos estado bien. Una lástima!

VERGONZOSO, CARISIMO Y POCA CANTIDAD, EL MARISCO NO ESTABA FRESTO Y LAS SARDINAS POR DENTRO CRUDAS. VERGONZOSOOOOOO

Fui a comer y repetí para cenar. Un año más tarde he vuelto y veo que mejora con el tiempo. Muy buenos sabores con un trato espectacular en un emplazamiento difícilmente mejorable junto al puerto. Una de mis visitas obligadas cada vez que vuelvo a Candás.

Sitio bastante normalito, calidad-precio caro. Nos dieron una mesa enana para tres personas, no cabía nada en la mesa, tanto que tuvimos que dejar la panera en el suelo. Nos gastamos 80 pavos, faltaba calidad en el servicio.