Mesón La Vega

Si te gusta disfrutar de la naturaleza, este es el sitio perfecto! Un lugar tranquilo pero no muy aislado. Alojamiento sencillo y muy limpio. La comida espectacular, especialmente el cocido lebaniego, de 10, y a un precio inigualable!! Trato amable y cercano. José Luis es muy cariñoso y muy atento. Repetiremos seguro!!!

Un lugar estupendo para orar a comer si estás de ruta y especialmente a los moteros.

Buena comida bien elaborada con una buena carta y un menú estupendo a 12 euros.

Buena carta con producto de la zona

Buenas instalaciones decoradas de la zona en casona de piedra.

Servicio amable y muy agradables con una buena terraza para toma e el vermout o el café. Comedor agradable y bien decorado

Una excelente opción para comer en la zona.

Genial la calidad del menú. Cocido impresionante. Postres sin palabras. Atención muy buena, a pesar de estar hasta arriba, nos hicieron un hueco y nos atendieron estupendamente. Relación calidad precio inmejorable. Recomendable 100x100

Pedimos comida de la carta porque los platos del menú parecían poco atractivos.

La comida no está mal, normalita, nada como para destacar ni volver a repetir. La fabada un poco sin más, el solomillo de ternera abierto en libro para que parezca más grande...en fin y los cuchillos de carne sin sierra...son detallitos que hay que cuidar. La tarta de queso manchego que todo el mundo dice que increíble no está mal pero no es ni de lejos de las mejores que he probado...

No entiendo las reseñas tan increíbles que tiene, le pondría 3 estrellas pero le voy a poner 2 para bajar un poco la media, que es inmerecida para mi gusto.

Visitamos Potes y nos quisimos alejar del mogollón de gente, vimos este restaurante por Internet y decidimos ir.
La comida muy rica y casera, el sitio pequeño, acogedor y limpio.
Dos adultos comimos cocido lebaniego y espectacular, sabor potente y muy bueno, la cantidad abundante.
Dos niños al menú del día, abundante y rico se fueron sin ganas de merendar.
De postres tomamos arroz con leche y flan de café, el flan muy bueno, cremoso y con sabor y el arroz con leche muy normalito.
Recomienso este sitio 100x100, si algún día volvemos por la zona iremos nuevamente.

Si no quieres comer en Potes o da la casualidad que encuentras todos los sitios conocidos completos, acércate a este pequeño restaurante.

Lo ideal es intentar reservar porqué no es muy grande pero está en un pueblo más apartado y menos conocido.

La verdad es que no salimos defraudados, tomamos un cocido liebaniego completo y estaba buenísimo, y era abundante, podíamos haber comido bien 3 personas. El precio del cocido cómo en casi todos los sitios, 16.5€ y 10€ de la sopa.

El vino blanco aunque no es un top estaba a un precio que en pocos sitios he encontrado para ser de bastante calidad.

Y la tarta de queso blanco, espectacular.

Si a eso lo unimos un trato muy amable y atento es un sitio para comer totalmente recomendable.

La comida calidad precio es muy buena. Nunca sales con hambre de ahí, si lo necesitas te sirven mas. El dueño José luis tiene mucho carácter incluso puede parecer malhumorado pero tiene un corazón de 10. Para lo que le pidas o necesites el siempre está ahí. Las trabajadoras Pili y Tere son muy atentas, cariñosas y amables y Dori la cocinera es todo corazón con unos postres que quitan el sentido. Repetiré muchos más días. Buen restaurante, con precios muy asequibles, comida tradicional y fácil aparcamiento en un entorno precioso.

Restaurante muy recomendable, pedimos cocido lebaniego, buenísimo y muy bien de precio. Es mejor reservar porque el salón es pequeño pero muy acogedor. La atención muy buena y muy rápidos.