El Café

Me ha gustado, aunque ya estuve hace dos años cuando estaba en su anterior ubicación. Esta nueva ubicación está muy bien, es más grande y ojalá no hubiera llovido porque fuera se habría estado fenomenal. Pero estuvimos muy bien de todas formas. Pedimos la ensalada de tomate de Cantabria con queso (que también pedimos hace dos años) y estaba igual de bueno, y patatas dos salsas para picar. De principales pedimos la pasta con aceite de albahaca y frutos secos y las palomitas de pollo, muy viejo todo y buena atención.

Doy dos estrellas por el lugar y por los precios razonables de las bebidas y pan. En cuanto a platos, mal detalle no ofrecer cambio de platos, podría haberlo pedido si, pero estoy valorando el servicio prestado. Los platos servidos no me han gustado, ensaladilla con un sabor muy marcado agrio hacia no disfrutar de los escasos ingredientes de la misma, cantidades pequeñas para gente que es de comer bien. Los chipirones ( 6 por ración a 16€ sería un buen precio si estuvieran buenos y tiernos ), respeto la forma de hacerlos pero la dureza o falta de cocinado de los mismos no tiene nada que ver, acompañados de poca salsa con trozos de cebolla muy básico. La atención en este caso ha sido rápida. Los precios de postres muy altos.

Local bonito, tuvimos que ir a la barra a pedir, que nos hartamos de esperar y ni una aceituna para acompañar a las cervezas. Los baños, descuidados. La siguiente bebida la tomamos en otro lado, con pincho. Prescindible con la oferta de hostelería que hay en Cabezón. 5.60 dos cañas, de coña.

Agradable local, dispone de una gran terraza para comer y zona de combinados, la comida está buena, los postres geniales(comimos un brownie super tierno, de 10). El servicio muy amable y atento.

Excelente lugar para tomar o comer cualquier cosa ,nosotros paramos para tomar un café y un helado en la terraza ,se estaba de maravilla,sitio bien cuidado y decorado ,precio ajustado y buen servicio,merece la pena hacer una parada.

Detallista. Desde el entono, pasando por el montaje de la mesa, la presentación de la comida y la atención prestada, en todo momento sientes la máxima atención prestada incluso a los más pequeños detalles.

La calidad de la comida excepcional con nueva calidad precio. Quizás un poco elevado el precio de la bebida.

Lo que si me resultó chocante fueron los baños, muy pequeño, incluso agobiante y un tanto dejados.
Además de mejorar su limpieza e recomendaria incluir algún detalle extra q compensara su tamaño, por ejemplo: un biombo frente a la puerta, ya q se encuentra frente a la barra y la puerta no cierra bien, mejorar el tema del espejo q es muy bajo, poner ambientador y quizás algún detalle decorativo tipo una cesta de mimbre para las toallas de papel o alguna planta colgante. Cosas q le dieran ese toque tan especial que tiene el resto del restaurante.

Simplemente EXCELENTE. Reubicados en éste 2021 (casi ná), merece y mucho la pena hacer un alto en el camino para comer o cenar (y seguramente merendar parte de sus postres…). Las terrazas tienen un encanto especial y te hacen sentir como en casa, con muy buena música de fondo y un equipo de camareros de 10. Nos ha encantado y cuándo andemos por aquí, volveremos con los ojos cerrados!

La atención es de 5 estrellas, eran simpatiquísimos! La comida muy rica, pedimos ensalada de queso de cabra y cecina, huevos con jamón y foie, torrija de pan brioche y un coulant de chocolate. La cuenta salió por 44€ aprox.