Casa Setien

Estupendo sitio de varias estancias, con jardines y espacio al aire libre. Está guay para ir con niños.

Tiene menús y opciones sin gluten.

Servicio correcto y atento y producto estupendo.

Muy recomendable!!!

A veces las imágenes dicen tan poco, probamos el pulpo, la ventresca de atún y el entrecôte, de 10, cocina muy bien ejecutada! El postre helado de quesucos, muy fino. Un placer la verdad.

Ideal para un aperitivo de fin de semana, en la terraza, muy buen precio calidad, vengo de Navarra y esto es mucjo mas barato, y de la calidad ni hablamos las rabas muy buenas,

Nada aconsejable, Comi menu fin de semana y me esperaba mucho mas la verdad tanta fama y alfinal nada mas bonito el entorno que la comida si vas con hambre te quedas con hambre con ese menu postres muy pequeños yo tube que pedir uno fuera de menu y aparte del menu un entrecot si no muero de hambre y barato no es encima no lo aconsejo.

Es un sitio ideal para comer, tomar algo o dar un paseo pq tiene una finca preciosa. Los precios son muy asequibles

Cenamos un grupo amplio con más de 100 pax. Y tras la tardanza en servir la mesa,al centro, trajeron tres platos con croquetas de jamón frías, pero no templadas no, frías; junto a ellas unas rabas (calientes ,si) duras y sin gracia alguna, sosas e insípidas. La ensalada pretensiosa pero sin alma ni jugo y mucho menos sabor. El lechazo entre asado y confitado adornado con 3 patatas panaderas ,sin ensalada tradicional solamente nos dejó con mal sabor de boca de un sitio con tanto renombre y platillo que se desvanece tras un servicio poco eficaz y descoordinado.Cerró la cena un par de bolas de helado de queso, con crocante de almendras y frutos rojos que estaba delicioso sin prestar atención a la decoración.
Quizás en otra ocasión me demuestren su alta cocina, ésta vez no fue así.

Era un excelente restaurante, pero ahora ya no merece la pena ir. Lo peor las rabas.

La comida muy buena y a un precio muy razonable. Si tengo poner algún pero, la camarera no derrochaba simpatía precisamente.