El Mortero

Sitio tranquilo, limpio y con una atención discreta y correcta. El comedor no es muy grande pero bien atendido. Fuimos después de acudir a otros sitios nefastos y la verdad que nos ha gustado mucho. Comanda:
Entrante: unos calamares fritos muy ricos y jugosos con su rebozado al punto y nada grasiento (Muy recomendables). Primeros : Ensalada de queso de cabra muy jugoso nada fuerte (para nuestro gusto demasiado dulce al usar reducción de módena y una especie de compota de higos con frutos secos y granada) y unas patatas con bacalao y arroz muy ricas.
Segundos: Lenguados en salsa americana con langostinos muy ricos y jugosos y unas carrilleras tiernas y sabrosas.
Postre: tarta de turrón y tarta de zanahoria muy rica también.
El café ha sido una decepción al ser cápsulas (Nespresso) y no de molienda normal. Volveremos.

El salón es muy agradable, cálido, con un hilo musical perfecto para comer. Todo estaba limpísimo, de verdad, sorprendente. El lechazo es simplemente espectacular, muy tierno, con un gran sabor, pedímos dos raciones. Recomiendo el tiramisú, muy muy bueno, brownie normalito. Para las niñas pedimos filete de pollo empanado con patatas, las pusieron dos filetes grandes, estaban muy buenos, de calidad. El servicio es inmejorable, todo a tiempo. Tenemos una peque con alergia a los frutos secos, la frieron todo con aceite nuevo, se veía la diferencia con el filete y patatas del otro plato. Miraron los alergenos del helado, empanado, etc. Muy muy atentos. Para repetir, sin duda.

Muy buena atención de ahí las tres estrellas.

La comida:

El menú del día de fin de semana son productos de quinta gama, las carrilleras no son caseras.

En cuanto el vino del menú no pueden poner en un menú de fin de semana un vino peleón, hay opciones como Protocolo joven que son baratos y están bien.

A la carta el pulpo está bueno.

Ellos son muy agradables pero un restaurante de categoría no puede tener esos fallos en un menú de 25€ que es la presentación del restaurante

Increíble! Fuimos a tomar el café eran las 21:45 de la noche y el camarero tras ignorarnos cuando le hablábamos para pedirle los cafés nos mareó constantemente diciendo que no había mesas libres cuando veíamos tres delante nuestro no se molestó ni en comprobarlo. En definitiva los más seguro es que tuviera la máquina limpia y no quisiera volver a ensuciarla. Lo entiendo , pero hay maneras y maneras de decirlo. Un trato horrible solo por el simple hecho de que sabía que era una comanda pequeña. Nos mandó al bar de enfrente “iros al bar de en frente”… que decepción

No volveremos.
Día de Reyes, vamos con previa reserva, a la carta 4 personas porque no hay menú especial (cosa que a diario sí hay menú).
Entramos y nos asignan una mesa nada más entrar,(cada vez q entran y salen dejan la puerta abierta y entra frío) le pido al dueño que nos cambie a otra mesa libre que tenía y me dice que no, q esa mesa está pedida.
Nos sentamos y de carta nos da un mantel individual de papel doblado. Con 4 entrantes, 2 de pescado, y 4 de carne.
Nos dicen que queremos de beber y le pido carta de vinos. No tiene. Te dice de palabra los vinos q tienen sin precio.
Elegimos vino.
Pedimos, nos traen el 1 para compartir y desde q terminamos el primero al 2 plato tardan 20 min.
Los postres nos los dicen de palabra.
Resumiendo, comida normal, servicio lento y poco atento.

Desaconsejo totalmente comer en este restaurante, el precio es totalmente desorbitado para una cantidad tan pobre…
Te pides un pulpo y te ponen solo una pata troceada con 3 patatas, un solomillo del tamaño de una albóndiga, cuatro chuletas de cordero con menos carne que el tobillo de un canario.
Entrará en la historia entre las mayores estafas de la historia a la altura del España-Corea 2002

No me gustó mucho la atención, partiendo de que íbamos a comer lechazo y cuando nos sentamos nos dijeron q no había, el menú muy normalito, casi escaso diría yo. Nos racionaron el pan diciendo que no había mas. Una visita turística rápida, pero no repetiría. Lo cierto esque fuimos porqe los restaurantes q nos recomendaron estaban ocupados, y este cumplió con lo q nos dijeron, comida escasa y alto precio.

Trato por el camarero muy bien pero la comida fatal escasa carisima pedimos lechazo nos pusieron una pierna y nos cobraron 44 € protestamos y nos dijeron que eran dos raciones tres trozos para no volver aconsejó que no vayáis por que os van a estafar