Bar Restaurante Círculo de Recreo

Lugar fantástico para estar y disfrutar no sólo de lo que tomes sino de todo el arte que tienen sus paredes y vidrieras. Es una lástima que el edificio en general esté tan poco cuidado por dentro. Deberían de tratar de cuidarlo más, es una lástima que confluyan juntos tan malos detalles con tanta belleza artística

El sitio tiene encanto, pq es un edificio con solera en Valladolid, tienen un menú diario q no defrauda ni por precio ni por calidad, cantidades grandes y todo hecho con mucho mimo. La verdad q riquísimo todo lo q probamos. 100% recomendable!!!

Comi en el restaurante con un grupo, fue menu y estuvo bien. Tiene amplios salones y ascensor. La comida esta bien. El edificio tiene mucha historia. Pude visitarlo entero en otra ocasion. Merece la pena la visita. Y el precio es adecuado.

Edificio con muchísimo encanto.

Ubicado en el Círculo de Recreo vallisoletano(antes sólo socios, ahora partes abiertas al público en general), edificio antiguo estilo finales del XIX principios del XX , sólo por ver el edificio ya merece la pena ir. El restaurante está bien, tienen menús de diario y fin de semana con buena relación calidad precio. Necesita un repaso y mejora de instalaciones, pero igual perdía su encanto. La puerta giratoria manual de la entrada será de las pocas que quedan en Valladolid. Recomendable.

Se trata de uno de los edificios más históricos de la ciudad de Valladolid, creado en 1844 como zona comercial y más tarde remodelado en 1914 a fin de conseguir grandiosos espacios bajo una línea neoclásica que refleja perfectamente el ambiente de aquella españa de principios de siglo en la que se daban los conocidos "salones de tertulia" del gusto de la época donde las élites aristrocráticas y la burguesía más selecta compartía momentos de charla y encuentro. El edificio consta de su pieza más representativa, "el salón de baile" cuya doble altura genera un espacio inmenso que condiciona el conjunto de la distribución. Sin duda, un lugar para conocer.

Menú del día 13€. Cerca de la plaza mayor. Nos atendió Belén. Excelente servicio. Porciones grandes. Comida casera! Restaurante en planta baja pero tienen ascensor.

Venimos a una comida de Navidad. Los canapés eran variados en sus formas pero no tanto en su sabor. Me han recordado a mi 12 cumpleaños.
Y los langostinos estaban bien porque tocábamos a 1'5 por persona para no llenarnos demasiado.
La ensalada...no la he entendido muy bien ni antes de venir ni después.
El rodaballo estaba bien...bien frio. Tanto el rodaballo como el entrecot han sido raciones tan grandes como los entrantes pero sí que es cierto que con 5 raciones de pan no nos quedamos con tanto hambre.

Esperamos una ración más de pan para hacer un bocata con los postres ya que al final empalmamos comida y merienda.

Muy divertido el sabor de la comida.👌