El sitio esta muy bien, muy recomendado para los peregrinos. Nos acercamos ahí porque nos dijeron que era el único sitio que tenia las cocinas abiertas. La camarera muy amable, nos dijo que nos podía hacer la combinación de plato que quisiéramos que no había problema. Comimos una patatas mixtas (salsa brava y alioli) muy buenas y unas rabas.
Anacleto242 años atrás
Este sitio es RECOMENDABLE al 100% Nosotros estábamos haciendo el camino de santiago y paramos acomer después de 24km...para reponer fuerzas y realizar los últimos 9 hasta trabadelo. Buscando sitios para comer no encontrábamos ninguno que sirviera comidas porque era muy pronto, las 12:30 más o menos y nos dijeron que este sitio estaba abierto y servia comidas. Al hacercarnos le preguntamos a la camarera si podíamos comer algo y nos dijo que nos hacía cualquier cosa de la carta y hasta sino salía salía la carta y queríamos una tortilla a la francesa también. Pedimos unas patatas de 2 salsas y unas rabas con unas cervezas. Toda la comida estaba buenísima y puso bastante cantidad para 2 personas y las jarras de cerveza fresquisimas. Encima la camarera súper maja, amable y atenta. Vamos lo dicho anteriormente recomendable 100%
Jose Carlos Valero2 años atrás
Servicio lento. Un poco descontrolado cuando las mesas de la plaza están ocupadas en su mayoría. Nos sentamos con la intención de tomar algo y acabar cenando y se quedó en unas cervezas, a un precio bastante elevado comparado con la competencia cercana, y de tapa tres trocitos muy pequeños de empanada. Por diferencia de precio y servicio, hay mejores opciones en la misma plaza.
Mark1122 años atrás
Buen sitio para comer o cenar.Además el personal es muy agradable y tienen un trato excelente.
Ana Cotaina2 años atrás
El restaurante menos indicado para comer. De entrada, sin tener la terraza llena y las terrazas colindantes sí que lo estaban, nos da aviso la propietaria en plan ufano de que no vamos a ser servidos hasta por lo menos unos 45 minutos, eso ya te deja sin ganas de quedarte por el tono y la intención. A la hora de pagar nos dicen que en el menú no entraban los tercios de cerveza pero sí las cañas y esto no se nos informó. Ni se plantean compensar la diferencia porque eso fue decisión nuestra, directamente se nos cobra la bebida aparte. Una pena que traten el cliente de esta forma, por esta razón no se les llena la terraza. La comida buena tirando a aceptable, es lo único positivo al respecto del producto, no de su propietaria y ayudantes.
Clara Juárez Aira2 años atrás
Mis desayunos favoritos. Ahora con nuevo look. La atención es siempre de 10. Muy atentos con los clientes. El café de los más ricos de Villafranca, altamente recomendable. También los zumos de naranja naturales, y las tostadas de tomate. La bollería siempre es fresca. Para repetir 365 días.
Andrea Blasco2 años atrás
Si tenéis pensado comer aquí, os recomiendo ir a los otros bares/restaurantes que se encuentran a su lado. La atención y la comida será muchísimo mejor. Nosotros cuando llegamos tenían la terraza casi vacía y a pesar de eso, nos informaron de que iba a haber un tiempo de espera y que nos atenderían por orden (pero mi pregunta es... Si no te estás preocupando en saber quién se sienta primero, ¿cómo vas a atender por orden de llegada?). Pues bien, al preguntarle a la camarera del tiempo de espera, se vería un poco agobiada o algo porque al poco salió otra camarera más mayor hablándonos de malas formas e informándonos del tiempo exacto de espera. (incluso nos invitó a irnos si queríamos) A pesar de todo eso, decidimos dar una oportunidad y quedarnos a comer, pero nuestra sorpresa llegó a la hora de pagar. Al mirar la cuenta vemos que nos cobran los tercios que habíamos consumido. Al verlo, le comunicamos que en el menú entraba la bebida, el postre y el pan; a lo que la camarera responde que las bebidas solo incluía agua o caña. En ningún momento se nos informó de eso, ya que la propia camarera que nos tomó nota debería de haberlo informado. Después de un tiempo de discusión y aguantar comentarios inoportunos por parte de la camarera/propietaria, conseguimos que nos diera dos botellas de agua que nos correspondía por los menús, ya que tan siquiera nos daba ninguna solución. Lo mejor fue leer el ticket y ver que en vez de cobrarse los tercios se habían cobrado unas cañas. ¿Deberíamos de haberles discutido más? Puede, pero...¿para qué? Solo había que mirar alrededor para saber porqué nadie estaba en ese restaurante. En fin, lo que no entiendo es cómo bares así pueden estar en funcionamiento, ya que si no tienes ganas de trabajar o de cuidar al cliente, lo mejor es no montarlo y ya sin hablar de cómo el servicio trabajaba de lento. Definitivamente, si alguna vez se me ocurriera volver, antes me iría al restaurante de al lado que seguro que me atenderían mucho mejor. ¡DECEPCIONANTE!
Fernando Sánchez Ramírez2 años atrás
Buen lugar en la plaza Mayor para tomar el sándwich Compostela, muy rico. También he probado la tortilla con chorizo y muy buena. Tiene raciones, cazuelas y bocadillos. Trato agradable.
Nos acercamos ahí porque nos dijeron que era el único sitio que tenia las cocinas abiertas.
La camarera muy amable, nos dijo que nos podía hacer la combinación de plato que quisiéramos que no había problema.
Comimos una patatas mixtas (salsa brava y alioli) muy buenas y unas rabas.
Nosotros estábamos haciendo el camino de santiago y paramos acomer después de 24km...para reponer fuerzas y realizar los últimos 9 hasta trabadelo. Buscando sitios para comer no encontrábamos ninguno que sirviera comidas porque era muy pronto, las 12:30 más o menos y nos dijeron que este sitio estaba abierto y servia comidas.
Al hacercarnos le preguntamos a la camarera si podíamos comer algo y nos dijo que nos hacía cualquier cosa de la carta y hasta sino salía salía la carta y queríamos una tortilla a la francesa también.
Pedimos unas patatas de 2 salsas y unas rabas con unas cervezas. Toda la comida estaba buenísima y puso bastante cantidad para 2 personas y las jarras de cerveza fresquisimas. Encima la camarera súper maja, amable y atenta. Vamos lo dicho anteriormente recomendable 100%
Nos sentamos con la intención de tomar algo y acabar cenando y se quedó en unas cervezas, a un precio bastante elevado comparado con la competencia cercana, y de tapa tres trocitos muy pequeños de empanada.
Por diferencia de precio y servicio, hay mejores opciones en la misma plaza.
A la hora de pagar nos dicen que en el menú no entraban los tercios de cerveza pero sí las cañas y esto no se nos informó. Ni se plantean compensar la diferencia porque eso fue decisión nuestra, directamente se nos cobra la bebida aparte. Una pena que traten el cliente de esta forma, por esta razón no se les llena la terraza. La comida buena tirando a aceptable, es lo único positivo al respecto del producto, no de su propietaria y ayudantes.
Ahora con nuevo look.
La atención es siempre de 10. Muy atentos con los clientes.
El café de los más ricos de Villafranca, altamente recomendable. También los zumos de naranja naturales, y las tostadas de tomate. La bollería siempre es fresca.
Para repetir 365 días.
Nosotros cuando llegamos tenían la terraza casi vacía y a pesar de eso, nos informaron de que iba a haber un tiempo de espera y que nos atenderían por orden (pero mi pregunta es... Si no te estás preocupando en saber quién se sienta primero, ¿cómo vas a atender por orden de llegada?). Pues bien, al preguntarle a la camarera del tiempo de espera, se vería un poco agobiada o algo porque al poco salió otra camarera más mayor hablándonos de malas formas e informándonos del tiempo exacto de espera. (incluso nos invitó a irnos si queríamos)
A pesar de todo eso, decidimos dar una oportunidad y quedarnos a comer, pero nuestra sorpresa llegó a la hora de pagar. Al mirar la cuenta vemos que nos cobran los tercios que habíamos consumido. Al verlo, le comunicamos que en el menú entraba la bebida, el postre y el pan; a lo que la camarera responde que las bebidas solo incluía agua o caña. En ningún momento se nos informó de eso, ya que la propia camarera que nos tomó nota debería de haberlo informado.
Después de un tiempo de discusión y aguantar comentarios inoportunos por parte de la camarera/propietaria, conseguimos que nos diera dos botellas de agua que nos correspondía por los menús, ya que tan siquiera nos daba ninguna solución. Lo mejor fue leer el ticket y ver que en vez de cobrarse los tercios se habían cobrado unas cañas. ¿Deberíamos de haberles discutido más? Puede, pero...¿para qué? Solo había que mirar alrededor para saber porqué nadie estaba en ese restaurante.
En fin, lo que no entiendo es cómo bares así pueden estar en funcionamiento, ya que si no tienes ganas de trabajar o de cuidar al cliente, lo mejor es no montarlo y ya sin hablar de cómo el servicio trabajaba de lento.
Definitivamente, si alguna vez se me ocurriera volver, antes me iría al restaurante de al lado que seguro que me atenderían mucho mejor. ¡DECEPCIONANTE!