Es un sitio que te gusta o no te gusta, no hay término medio. Muy de los de siempre, clientes habituales. La comida de siempre, fuerte y muy sabrosa. El restaurante lo llevan dos personas solas, el alma del sitio es la cocinera.
ANGEL Suarez2 años atrás
Anbiente rustico añejo y antiguo como los de antes y como pocos quedan. Los parroquianos y habituales del lugar coinciden todos en que se come muy bien, espero comprobar dicha afirmacion pronto. De momento, las tapas estan bastante bien, a la antigua usanza, sin remilgos ni florituras. Recomendable, para un viaje en el tiempo a los bares y tabernas de hace unos cuantos años.
Kenfo kenfo2 años atrás
Esencia de una taberna tradicional. Comida casera en estado puro. Sin lujos pero con la autenticidad del paso del tiempo en cada uno de sus elementos. La comida es sensacional, las raciones abundantes y el precio asequible. Exquisitos arroces, sensacional el salpicón de marisco, las croquetas, la ensaladilla rusa, las setas pero sobre todo destaca su bacalao al ajo arriero. Pidas lo que pidas es genial parece cocinado por tu abuela. El tabernero, Ángel, es un tipo singular y carismático que encaja perfectamente en la atmósfera del lugar. Visita obligada si te gusta lo auténtico.
Sara Bm2 años atrás
El sitio muy acogedor ,el personal muy amable,y la comida tradicional,como en casa te sientes ,sin lugar ha duda unos de los mejores sitios donde he comido y me he sentido muy bien .Muchas gracias por todo ,pienso repetir ,parada obligada en León . Recomiendo 100%
Sara Iglesias2 años atrás
Comida casera de verdad, buenísima, raciones más que generosas. Hay muchos sitios que presumen de comida casera pero muy pocos como este. Volveremos sin ninguna duda!
Enrique Ríos Argüello2 años atrás
Un lugar con encanto, una comida excepcional. El pollo de corral con bogavante (de encargo) es nivel superior.
David Garcia2 años atrás
Ángel y Jacinta,grandes!!!!.Te hace sentir como en casa.Trato familiar.Salpicon ,mollejas y arroz con bogavante.....insuperable.Ir sin prisa,merece la pena
LOLA BOTELLA2 años atrás
Dos veces he intentado ir a comer a este sitio. El primer día me dijeron que no tenía mesas libres, delante de una mesa vacía. El segundo día, a las 14:00 horas el bar vacío, y el dueño (un señor mayor), me dijo que tenía que confirmar si había sitio. 15 minutos antes llamé por teléfono para reservar, y me dijeron que no había resevas y había disponibilidad. Definitivamente, este señor no quiere que coma en su bar. Ni volveré
La comida es sensacional, las raciones abundantes y el precio asequible. Exquisitos arroces, sensacional el salpicón de marisco, las croquetas, la ensaladilla rusa, las setas pero sobre todo destaca su bacalao al ajo arriero.
Pidas lo que pidas es genial parece cocinado por tu abuela.
El tabernero, Ángel, es un tipo singular y carismático que encaja perfectamente en la atmósfera del lugar.
Visita obligada si te gusta lo auténtico.