Don Pancho

Volviendo de Madrid, llegamos a este restaurante casi por casualidad y fue todo un acierto. Desde que pedimos la bebida, el personal del restaurante estuvo muy atento, incluso nos pusieron unos aperitivos antes de tomarnos la comanda de la comida. La comida nos encantó y, como ya he comentado, el personal muy atento y simpático. Sin duda, será parada obligatoria cuando subamos a por la A6.

Sitio espectacular, recién reformado, la comida como siempre espectacular simplemente y el trato con los camareros al nivel de la comida. Peticion personal,a la cocinera la tenían que hacer cocinera de la selección española. 11 sobre 10

Estábamos de paso por Santa Olalla, no sabíamos a dónde ir para comer y busqué en google, vi que tenía muy buenas críticas y me dejé guiar por ellas, casi nunca fallo. Llegamos al bar y no había mucha gente, nos atendió el camarero muy amablemente y nos tomó nota, pedimos unas zamburiñas, sepia y postre para dos, la elección fue magnífica, nos encantó todo lo que pedimos, no tuvimos tiempo de hacer mas qué del postre jajaja. Estaba tan bueno que las fotos quedaron relegadas jaja. Solo nos acordamos de hacerle foto al postre. Si volvemos por allí, volveremos a comer ahí otra vez. Recomendable totalmente.

Restaurante muy acogedor para ir con familia o amigos. La comida excelente,sobre todo el tomate,buen entrante. Los postres también son muy exquisitos. Recomendable acudir al 100 por 100

Un buen lugar para comer en Santa Olalla. Iba de paso y fue un acierto parar. Abundante y a buen precio. A tener en cuenta para futuras ocasiones. Cuenta con terraza. El comedor es amplio. Un servicio rápido.

Un bar muy bonito y un servicio estupendo merece la pena entrar nosotros es la primera vez que vamos pero volveremos

Calidad-cantidad-precio increíbles. Hicimos un alto en el viaje y nos sorprendió muchísimo este establecimiento. La atención exquisita, camareros rápidos, amables y cuidadosos.
Será mi punto de para obligada cuando pasemos por allí

Una muy grata sorpresa... íbamos sin conocer nada del pueblo ni reserva o referencias, y siendo una mesa grande y con muchos niños, todo fue fantástico...

La oreja se merece una reseña aparte.. sencillamente espectacular.

Espero repetir