Hotel Restaurante Flor de La Mancha.

Buen sitio para parar a comer y seguir el viaje.
Servicio muy rápido y atento.
Salones pintorescos con decoración taurina, el menú por algo menos de 14€ no está mal, muchas posibilidades donde elegir siendo todas de cantidades correctas menos las croquetas que son 3 unidades y encima saladas.....
Varios postres también donde elegir aunque no todos son caseros y la tarta de queso con un regusto extraño.
Un punto a favor es la rosca de pan que estaba muy buena.

Comer bien y a buen precio. Pedimos menú del día un día de diario, 13.20 con primero, segundo y postre. Las judías con oreja y chorizo de primero muy buenas, y la carne a la parrilla de segundo (solomillo y secreto de cerdo) buena cantidad y muy tierna, de postre flan y pan de Calatrava muy ricos y la porción de pan de Calatrava de buen tamaño. El pan que ponen con el menú es abundante y de buena calidad (no es el típico pan chicloso que suelen poner en muchos sitios, sino que es pan de tahona o por lo menos lo aparenta). El trato con el personal excelente. Si algún día vuelvo por la zona pararé aquí sin dudarlo. Recomendado.

Es un buen restaurante, tiene una amplia carta y sobre todo mucho tiempo de vida y eso ya nos dice que algo funciona bien. Tiene un amplio menú donde poder elegir, para mí ha sido las judías verdes con jamón y el pollo a la brasa, otro comensal el solomillo de cerdo, según él, un poquito seco, pero nos encontramos con un menú diario y no estará todo por igual pero personalmente estaba rico y volvería a almorzar.
Por cierto, pedimos fuera del menú una ración de oreja a la plancha y estaba genial.

Hemos comido el menú de 15€ . Es domingo. No está mal, pero antes estaba mejor. El solomillo a la brasa bastante pasado, la tarta de queso no sabe a nada. El resto de los platos bastante correctos

Paramos a cenar estando de viaje, puedes cenar dentro o en la terraza que tienen que es bastante grande. La atención muy buena y rápida. Lo único que la confitería es muy cara, los mismos productos están en Albacete con una diferencia de 5 euros. Pero si es recomendable para una parada en viaje.

Me gustó en general, pero creo que tiene poco personal para la cantidad de personas que van. El trato de la señora que me atendió muy amable da gusto con ella. Pedí una tortilla de patata que tenía buena pinta, pero me desilusionó no tenia sabor. Se puede comprar toda clase de navajas , souvenirs y por supuesto los famosos Miguelitos 12 variados x 8€ , hay quesos, y otras cosas que puedes comprar.

Hotel limpio, cuidado, de largos pasillos. Habitaciones cómodas. Parking gratuito muy amplio. La decoración del restaurante preciosa, muy densa. Se respira ambiente muy activo, nada que ver con un bar de pueblo. Único inconveniente: apartado del centro del pueblo.

Fuimos a comer al restaurante, la comida buenísima, pero en la terraza nos tuvimos que ir sin comer de la cantidad tan excesiva de moscas que habían. Tuvimos que pedir que pusieran la comida para llevar y comer en el coche. Otras mesas también lo hicieron. Abrias la boca y se colgaban las moscas. Sin exagerar más de 10/12 moscas por plato.