Bar Borneo

Fuimos a comer un grupo de 12 personas, adultos y niños y la verdad es que nos trataron estupendamente bien y comimos fenomenal. Todo un acierto. Volveremos si tenemos ocasión. Mención especial para el morteruelo. Riquísimo.

El mejor sitio en el que he comido en Sacedón hasta la fecha. Pedimos las croquetas caseras de chuletón (las mejores que he probado) y las de queso azul, y tuvimos que probar las otras dos (jamón y chipirones). Después unos huevos rotos con gambas,y morteruelo. La tarta de oreo blanca que pedimos de postre se notaba que era casera y estaba riquísima. Toda la comida en general se nota que es casera y que está hecha con mimo. La camarera nos atendió en terraza muy bien, y nos hizo sentir cómodos en todo momento. Como curiosidad, decir que vimos un cliente acompañado de un perro grande dentro del local, por lo que el establecimiento es pet-friendly. Repetiremos para comer o cenar si vamos de visita por la zona. Un gran descubrimiento. Buen trabajo!!

La comida y la atención son de 10.
La hamburguesa super completa, acompañada de patatas caseras. De postre una tarta de queso y una nueva incorporación, tarta de oreo blanca, ambas riquísimas. Con ganas de volver a probar el cachopo 🤭

El mejor restaurante de sacedon de lejos! Local decorado con gusto, servicio agradable, comida muy buena. Nos decantamos por la hamburguesa, tuvimos que repetir! Volveremos para probar el cachopo seguro!

La atención ha sido muy rápida y amable.
Hemos venido por el cachopo, y no decepciona!!!
Y los postres caseros están buenísimos!

Muy buen sitio para comer después de una mañana navegando el pantano. (Recomiendo reservar)
Cachopo suficiente y sobraba para 8 personas.
Las croquetas tanto de queso y de jamón exquisitas, lo recomiendo.
Los huevos rotos con gambas al ajillo muy ricos.
La ensalada muy abundante.
Los torreznos muy ricos.
Los postres muy muy buenos destacando tarta de oreo, la de queso( sublime) y brownie con helado de vainilla.
Las camareras muy muy atentas y muy simpáticas y eficientes.

Un sitio donde la atención y la calidad son francamente buenos.
Las raciones generosas, a destacar los torreznos y las bravas. El bacalao confitado con crema de puerros muy bueno. Pedimos también unos huevos rotos con jamón. Éramos 3 y no pudimos terminar todo.
Si eres celíaco sin problema te hacen unas papas fritas y unos filetes a la plancha.
La cocina abre a las 14.00, y se llena así que mejor reservar.
Lo recomiendo.

Nos ha encantado. Destacó la simpatía de las camareras y su honestidad al aconsejarnos. La comida muy rica… el timbal de rabo de toro espectacular…. Los postres caseros y buenísimos, volveremos a comer ese cachopo y no tardaremos