Piccadilly Avenue

Sinceramente, esperaba más. Prometía el local por su decoración industrial europea, muy cosmopolita. La atención del personal muy correcta y amable. La carta de vinos mejorable pero con buenas opciones. Sin embargo, la comida me pareció que es más el nombre que el resultado. Las zamburiñas con aceite y lima no tenían un sabor especial. El pan bao con pato y salsa era bastante normal. Lo que menos me gustó fue el calamar "cincelado", con palomitas y anís 🥴 una mezcla sin sentido. Quiero volver al desayuno, parece que hay buenas opciones. Probad y comentad. Igual no elegí bien.

Lugar original, hamburguesa y entrantes muy ricos. Los postres un poco flojos, muy dulces y sabores parecidos. Para Albacete un pelín caro pero al menos se han arriesgado en ofrecer una oferta diferente. Volveré a probar más platos. Ah! Y los camareros majisimos y muy atentos

Es la tercera vez que voy, con el paso de las visitas he notado un cambio muy notorio ,las raciones ahora son más grandes ,el trato es excelente,lo recomiendo 100% ,sobre todo la hamburguesa de donut.

Restaurante muy curioso.
Platos muy elaborados y camareros muy preparados para servirlos y explicarlos.
Tienen una carta que, aunque no es muy extensa, no tiene nada "típico". Todo lo que probamos estaba muy bueno y el precio a mi gusto era barato para esta calidad.
Volvería sin dudarlo.

Un sitio de 10. En todos sus aspectos merece mis felicitaciones; el local está muy bien cuidado y con personalidad propia. Los camareros muy amables y formados, han sido rápidos y además la comida estaba muy deliciosa.

Un lugar imperdible a la hora de visitar Albacete.

Tiene una carta de comida rápida con toques modernos. Cuidan la presentación de los platos y en general están bastante buenos.
El local es amplio y con una decoración muy chula, simulando una estación de metro en pleno Albacete.
Los camareros muy simpáticos y dispuestos a hacer recomendaciones.
Repetiremos.

"Piccadilly Avenue" ya es de mis lugares favoritos: comida riquísima, vanguardista y de gran calidad (¡está todo buenísimo y sus platos sorprenden! -atención al emplatado), cócteles espectaculares y postres novedosos que no dejan indiferente. Del ambiente y la música, me encanta la decoración moderna y los grafiti dan el toque perfecto que te trasladan a un ambiente urbano y desenfadado de cualquier gran ciudad del mundo. Si a todo esto le añades un personal muy profesional, amable y atento (el toque de los uniformes y la explicación de cada plato mola), se convierte en parada obligatoria que no te puedes perder. Seguro que si pruebas Piccadilly, repetirás. ¡Y en Albacete! 🔝👍🏼

Un sitio k además de comer puedes tomarte unos cócteles increíbles, muy buenos, de precio genial, nosotros no fuimos a comer pero si probamos varios y estaban todos muy buenos, muy recomendable