M - 15

Nos han tratado fenomenal. Pedimos mesa para las 4, porque estaba todo reservado y a las 3 y media, sentados. Al reservar pedí paella y al ponerla en la mesa no tenía un aspecto muy bueno, pero resultó deliciosa. El servicio muy agradable en el trato y muy simpáticos. Limpieza en el establecimiento y los baños impecables. Conviene reservar el día anterior.

Muy buena la paella, se nota que el fumet de la misma, es casero realizado por ellos, espectaculares.
Las ensaladas brutales.
El servicio perfecto, la paella a la hora justa que nos dijeron y la mesa disponible antes de la hora concertada.
El lugar perfecto, en la misma.playa, bonito sobre todo la terraza jardin, muy acojedor y relajante.
El parking todo con sombra, el cual es perfecto en verano, solo accessible a clientes.

He estado en otras ocasiones y nunca el servicio había tardado tanto en todo, hasta para cobrar!
Puedo entender había muchas mesas pero tb bastantes camarer@s.... Tienen el verano en adelante para organizarse mejor

Fantástico destino para reponer líquidos en un día de playa.

Amplia terraza interior y mesas para tapeo o café a pie de la playa.

Ofrecen posibilidad para llevarte tu bebida en bandeja a tu sombrilla.

También cuenta con alguna mesa alta dentro.

Buenos y variados combinados de bebidas+ración.

El servicio es rápido.

Suele estar bastante concurrido en los momentos clave del día.

Exquisito el menú. Buen ambiente y buen trato por parte de los camarer@s
Menú de grupo excelente.

Una experiencia para olvidar. Para empezar hemos pedido 2 sangrías de cava, las cuales solo llevaban fanta y cava. Para rematar nos las han puesto sin hielo. Después, nos han servido unos chipirones fritos bastante indeseables, hemos continuado con unos mejillones que hemos tenido que devolver porque estaban realmente malos, deshechos y con mal olor. Hemos comido un arroz negro sin sabor y una paella de marisco pasada. Es verano y no hay aire acondicionado, pero tampoco nos han dejado abrir las ventanas. Otro detalle más ha sido cuando nos han servido una coca-cola, el camarero nos comenta que no está fría, nos la sirven con un único hielo y si queríamos más, teníamos que pagarlos. No os recomiendo este lugar si queréis una buena comida.

Lugar grande, con parking para aparcar con seguridad.
La atención excelente, la comida estaba muy buena, y los postres también.
Un ambiente muy agradable y vistas impresionantes al mar.

La paella está bien, el lugar es un chiringuito sin más pretensiones pero correcto, tiene parking que es un plus sobre todo en esta época, por eso durante muchos años hemos visitado este restaurante en muchas ocasiones. No recuerdo que la atención por parte del personal, sobre todo por parte del que no sé si es dueño o encargado fuera tan pésima. Nos trató con desprecio, como si nos estuviera perdonando la vida, desde que reservamos la mesa hasta que pagamos la cuenta, desagradable, maleducado, gruñendo constantemente, por el solo hecho de pedirle por favor que nos trajeran una botella de agua, increíble,de verdad que jamás me había sentido tan mal tratada en un restaurante. Aún busco la cámara oculta.