Asador La Almenara

Un sitio al que llegamos por casualidad y nos encantó. Llegamos algo tarde para la hora de comida y aún así nos trataron con todo el mimo del mundo y muy amables.
La comida muy rica, comimos según el menú. El precio asequible.
La decoración preciosa y bastante llamativa, combinando motos dentro del local con decoración floral.
Además el local es muy amplio.
Lo recomiendo totalmente y estoy segura que volveré

Super chulo este sitio, con gran ambiente motero y una decoración vintage / moderno, que no pasa desapercibido..
Buen trato y amable por parte del personal y la comida, bocatas o raciones son excelentes y a buen precio.

El mejor restaurante de Robledo de Chavela con diferencia. Imposible calificar de 0 a 10 porque todo sería un 12, tanto la atención y amabilidad de sus dueños (Antonio y Ana) y del personal como la exquisitez de sus platos. Alta cocina a precio de barrio y con mucha variedad y mucha, mucha calidad. Mil gracias por las sensaciones que provoca comer vuestros platos.
Actualizo: EL CALDO GALLEGO ESTÁ DE ESCÁNDALO!!!! Tengo familia gallega y jamás he probado un caldo como aquí. Todo el que pase por Robledo debería parar a comer aquí como punto de paso obligatorio.

Hacía tiempo que no veníamos al asador por el tema del covid, y cuando hemos ido hoy a comer hemos quedado impresionados con el cambio de decoración del salón, mucho más moderno y luminoso guardando el toque rústico, y con la comida. Ha habido unos cambios en el menú que me han parecido un gran acierto!! 🤩 Pedimos el surtido de croquetas de jamón, cocido y boletus que siempre solíamos pedir cuando íbamos porque nos encantan! Y además, para probar nuevos platos, una pata de pulpo a la brasa que estaba increíblemente buena, al punto de textura y sabor, y un revuelto de morcilla con piñones y mango, espectacular!!!
El cachopo con queso Idiazábal y cecina nos entró por los ojos, así que pedimos medio para compartir y también nos sorprendió lo bueno que estaba!! No pedimos postre, nos pasamos pidiendo y estábamos a reventar! Pero salimos completamente satisfechos con los cambios, la comida y el trato del personal y con ganas de volver pronto 🤗

Buen sitio para hacer una parada en tu ruta,buenos desayunos con tostadas como Dios manda,buenos menús,platos bien preparados, baños limpios,dispone de terraza con armario para cascos (eso para los que somos moteros,un detalle) atención del personal buena,buen aparcamiento en las inmediaciones, relación/calidad precio buena, situación céntrica en el pueblo.

Para tomar una cerveza en la terraza si acaso. Ensalada mixta x 8€ escasa y solo lechuga y 4 trozos de tomate. Cachopo sin apenas sabor por 30€. Salón arriba rancio y servicio muy justito. No recomiendo

Este restaurante es un 5 estrellas como pocos.
Atención personalizada, deseando agradar.
Buena terraza, donde paran los "moteros".

Música a buen volumen en la terraza, da ambiente a un lugar distinto.
El dueño Antonio, un tipo cercano, profesional de la cocina, un cheff con energía positiva, que no escatima el tiempo, en explicarte cualquier duda de su deliciosa gastronomía, al nivel de los mejores restaurantes de la capital, a unos míseros 18 euros.
Aún cobrando el doble, seguiría siendo atractivo al paladar y a los 4 sentidos restantes.

Un comedor con cerca de 35 mesas, muy cuidado al detalle, con música ambiente elegida, unas ventanas en parte descubiertas, donde observar la montaña...
Los platos elaborados con suma atención y cariño, hacen que su sabor superlativo, nos haga perdernos entre el sabor y la satisfacción por haber elegido uno de los mejores (si no, el mejor) restaurantes de la zona.

Hay Motos de decoración, repartidas por el local, que le da un clima divergente.
Con certeza una buena elección , que en parte, hizo del fin de semana, una bonita fecha para recordar.
Apto para personas con gusto que sepan valorar lo atípico y pintoresco.

Los tiempos en servir los platos son excesivos. Alguno de los platos fríos y algún otro (piña de postre) tuvo que ser devuelto porque estaba pasada. La comida en general bien, salvo lo comentado. No sé si hemos tenido mala suerte o había poco personal.