Arrocería Cala Proserpina

Un sitio precioso, con unas vistas geniales y raciones bien despachadas. La pega es que, siendo una arrocería, el arroz sólo lo sirven por encargo durante el fin de semana, no me parece que deba ser así, he estado en varias y el arroz que hay en la carta lo puedes pedir en cualquier momento.

Había escuchado que tenían un arroz buenísimo, me llevé una decepción tremenda al probarlo. Pedimos arroz con bogavante y estaba completamente insípido (ni el bogavante sabía a bogavante), no sé si los cocineros de verdad saben hacerlo siquiera, porque estaba hecho en una paellera cuando un arroz así que debe ser caldoso se hace en una caldereta o similar. Si vais a pedirlo reservar o llamar antes porque tardan media hora en hacerlo.
Probamos también los rejos y el bacalao a la dorada ambas cosas sosísimas.

Lo mejor de todo las vistas.

Es un lugar hermoso para venir a comer... magnífica atención desde que entras te sientes en casa las vistas hermosas inigualable lo recomiendo sin ninguna duda... calidad precio excelente

Sitio único para ir a comer. La comida exquisita, y el chiringuito está climatizado. Muy recomendable para ir con niños, porque tiene un parque infantil enorme y se ve desde las mesas.

Hoy hemos estado comiendo una paella de marisco, y estaba excelente. El cocinero, que además es bastante amable, ha demostrado ser un gran profesional de la cocina.
Los dos camareros, son encantadores. Por desgracia, hoy en día no es demasiado habitual que te atiendan así de bien en un restaurante, por lo que si sumamos la buena cocina, al estupendo trato personal, es igual a que el cliente queda totalmente satisfecho.
Las vistas desde la mesa son muy bonitas.
Volveremos.

Magnífico arroz. Atención muy buena. Lugar precioso. Que más puedes pedir?

Vistas geniales y ambiente agradable con mucha variedad en arroces.

Las vistas son bonitas y se está cómodo. El arroz que encargamos estaba listo a la hora prevista . Cogimos arroz negro, viene con un cuenco con un poco de alioli.

El arroz estaba demasiado salado, no era fácil de comer, nadie se interesó por saber qué nos había parecido la comida y parecían saturados, si bien es cierto, al final el chiringuito estaba lleno.

El personal amable y si es verdad que al principio fueron muy rápidos, luego tardaron en atendernos cuando queríamos la cuenta, incluso me quedé sin una coca cola porque no se la pude pedir.