Restaurante Faro de Salvora

Me ha gustado mucho!
Paramos a comer en plan "tapeo" las raciones eran abundantes, con un buen sabor y con unos precios muy competitivos.
En cuanto a los postres te especifican cuáles son o no caseros, y ambos estaban muy buenos.
La camarera que nos atendió era muy amable y simpática.
El local está limpio y los baños también.

Calidad precio de lo mejor que se puede encontrar por la zona.
Las carrilleras al Pedro Ximénez exquisitas, al igual que las croquetas (hincapié en las de Pulpo).
Los chipirones también buenos, por la contra... Los calamares no están mal, se salvan bastante gracias al Ali oli espectacular que los acompaña.
Los postres ricos, y el servicio muy amable.

Uno de los pocos sitios en Aguiño( pues cada vez hay menos)donde picar o comer algo. Relación calidad-precio correcta así como el servicio(antes eran muy lentos pero ahora cambio la dirección).

Maravillosa cena cerca del mar. El pulpo estaba riquísimo!!! Y las zamburiñas y los huevos rotos también. Tiempo de espera razonable y tapa con la caña 😍

Hemos comido de lujo. El precio muy bien, las raciones generosas y el producto buenísimo. Y los alrededores muy bonitos.

Acudimos mi pareja y yo con la idea de pedir a la carta porque muchas cosas nos tenían buena pinta y finalmente comimos el menú del día y creo que acertamos. De primero guiso de mejillones exquisito y de segundo lenguado a la plancha muy rico. Acompañado de una botella de Albariño y dos postres. Todo por 19€!! Volveremos seguro, porque además tenemos pendiente el famoso bocadillo de pulpo que probaremos en los próximos días! En muchos comentarios leí que había que esperar demasiado, pero la verdad que hoy con el local lleno no fue nada exagerado. Muy recomendable!

Reservar con antelación, muy buena calidad, comer arriba sino os comen las moscas abajo.

En cuanto a la comida, excelente y el sabor exquisito. Productos de primera, Algunas raciones un poco pequeñas. En cuanto al restaurant, tal vez modernizarlo un poco. Deberían mejorar el servicio de los baños, el de caballeros muy pequeño e incómodo.