Cervecería Restaurante KiKo

Comida de calidad y buena atención del personal así como amabilidad. El precio ajustado. Las vistas al mar.

Hemos ido un par de veces, la verdad es que es un gran sitio. Los precios son un poco altos y hay platos que podrían estar mejor (por ejemplo el pulpo con patatas está muy aceitoso y no es el mejor de la zona) pero aún así la comida es espectacular, no entiendo la gente que se queja. Hay variedad de carta, los precios rondan en los 15-18€ por plato aunque hay platos más bajos y, obviamente más altos y están buenísimos y vienen en gran cantidad. Pero la razón por la que se llevan 5 estrellas es porque al igual que pasa en bastantes sitios, el bar lo hacen los camareros y cocineros, y tengo que remarcar que el servicio de Miguel es totalmente espectacular. Aún cerrando a las 4 o 4:30 la cocina, ellos a las 5 seguían sirviendo a los clientes, con prisas, sofocados y haciendo lo posible por nosotros. Otro día pedimos un chuletón y el que parecía el encargado de cocinarlo vino a enseñarnoslo y a preguntar qué tal estaba todo lo demás, se nota que le ponen mimo a lo que cocinan y que se sienten orgullosos, si no no sacarían el producto para que lo veas antes de comerlo. Es un lugar al que le ponen mucho esfuerzo y es admirable, muchísimas gracias por vuestro servicio!!

Pegado a la playa, es una cervecería para tomar sobre todo raciones,
Tiene unas espectaculares vistas porque el local es bonito y dentro tiene unas grandes cristaleras que hace como que estas comiendo encima del mar, el trato es muy atento y amable, tiene tambien terraza con vistas a la playa.

Probamos el arroz meloso con rape y almejas con nata, estaba de vicio (recomendamos pedir con antelación para que lo tengan preparado), pulpo a la gallega con un aceite de oliva espectacular, la pata de Cordero deliciosa. El trato muy bueno, muy preocupados por la espera y por que nos hubiese gustado la comida. Sin duda repetiremos.

No lo recomiendo, si podéis mejor id a otro lugar del puerto. Precios muy altos para la calidad de los alimentos…. Además el servicio muy lento, añadiendo también que tardaron más de 40’ en hacer un simple Secreto Ibérico (de ibérico no tenía nada), el cual estaba muy seco e incomible (me llegó a sentar mal y todo). Lo único que recomiendo positivamente son las vistas aunque para ir a un sitio bonito y comer mal mejor ir a otros establecimientos igual de bonitos.Las tapas mejor ni hablo….

Un restaurante muy bueno, una atención muy buena.
Variedad en comida, platos combinados, carnes, pescado, raciones... en general muy bueno.

Está al lado de la playa das un par de pasos y pisas la arena de la playa. Con la bebida nos trajeron una tapa de salpicón, aunque tenían varias tapas.

El local es amplio y puedes escoger terraza o dentro del local es todo cristalera y puedes ver la playa.

Actualizando volví a este bar y pedí un café con leche y a todos los clientes les daban un bollo de chocolate en concreto a tres personas que estaban en diferentes mesas y a mí no. NO vuelvo

Para tomar algo esta bien pero para cenar no lo recomendaría. Demasiado caro para lo que es, un plato de pulpo con pequeñas patatas no muy allá 15€, para mi gusto el pulpo mediocre. 14€ por secreto ibérico muy seco parecía suela de zapato… en conclusión pienso que deberían bajarse los precios ya que la calidad precio no es buena. Deberían poner platos más sencillos si no están dispuestos a cocinar bien.