Restaurante Casa Petra

En 2020 siempre estaba lleno y siempre parecía que no había mesa. Así que este año aprovechamos cuando vimos alguna libre y al final fuimos dos veces, y la verdad es que las dos estaba todo buenísimo.
En ambas ocasiones pedimos zamburiñas (frescas frescas y supersabrosas), y luego una vez pulpo y entrecote con patatas y de postre crema de limón y helado de moka; y la otra croca con patatas, flan de queso y el helado de nuevo.
Como he dicho, todo estupendo, y el servicio fenomenal. Todos muy majos y simpáticos. Cuando volvamos, repetimos seguro.

Una experiencia magnífica en nuestro viaje sin gluten. Hemos podido disfrutar un montón de platos sin gluten y mi pareja incluso de uno no apto que la verdad me moría de envidia porque olía a gloria. Disponen de postres aptos también. La única pega que no disponen de pan sin gluten, pero tampoco es nada preocupante ya que lo compensan con la calidad del producto y sobre todo, de sus trabajadores. Volveremos a repetir sin duda

Fuimos a comer sin reserva, cuatro personas. Raciones abundantes y todo muy rico, especialmente la ensalada templada con langostinos. Se podría mejorar la atención, no están demasiado pendientes de las mesas. Relación calidad/precio bastante buena.

Restaurante típico de puerto. No es bonito, ni nuevo, ni tiene decoración de diseñador, pero esta limpio, bien cuidado, y en nuestro caso, bien atendido. Ideal para unas raciones de productos típicos de la zona con buena materia prima, bien cocinado, y a un precio asequible. El único "pero" es que todo va "aliñado" con patatas fritas....

Como suele ocurrir cuando se está de vacaciones, lugar encontrado de casualidad.
Está en una ubicación muy bonita frente a la ría de Muros, es relativamente fácil encontrar aparcamiento.
Preparado para gente con movilidad reducida.
Cumple las normas covid 19.
Pedimos pulpo a feira que estaba buenísimo (15 euros).
Almejas sabrosísimas (14 euros)
Dos tiradas de cerveza
Un café.
Todo buenísimo, relación calidad/ precio dentro de lo normal para un local turístico y en pleno mes de agosto.
Personal agradable y muy profesional.
Nos atendió Moncha, una mujer agradable, paciente y profesional.
Sin duda lo recomiendo.

Buen sitio, todo muy rico. Hemos pedido la caldeirada de pulpo y el lacón templado. Los postres muy ricos.

Dimos con este sitio por casualidad y sin duda ha sido todo un acierto, cada plato mejor que el anterior y con una calidad exquisita, un obligado es el pulpo al estilo Petra.

El personal super amable y un trato exquisito en todo momento. Si vienes a muros este es tu sitio.

De esos lugares que tropiezas por casualidad ,empiezas sentándose a tomar un vino y al final decides quedarte a comer viendo las raciones generosas que hay en las otras mesas. Todo más qué correcto.