Restaurante O Mirallos - Manuel

Una alegría en medio del camino!!! Los bocadillos grandes con pan delicioso y carne única, la tortilla... con un sabor del de toda la vida que hace tiempo que no probaba y lo más espectacular su tamaño ( más de un palmo de alta). Para terminar de sorprendernos el precio muy barato para todo lo que comimos. Uno de los mejores recuerdos en nuestro Camino de Santiago 😄

Etapa en Ferreiros. Encontramos el restaurante en Google. Muy acertado. El personal muy simpático. La comida genial. Postres, vinos y licores caseros. Entrecote de primera en su punto perfecto por 12€. Muy aconsejable.

Este restaurante ha sido de lo mejor que nos hemos encontrado en el camino. Nos han atendido muy bien y hemos comido como reyes. Los precios son acordes a la calidad y la cantidad de los platos. No dejéis de pedir las vieras con queso si están en carta porque son espectaculares. Una parada obligatoria en el camino.

Aun se conserva el espíritu de comer cual bestia en este restaurante; comida auténtica y relación calidad-precio inmejorable. Si llega a tener hostal me quedo allí bebiendo para bajar el chuletón.

Muy buen descubrimiento!! Encontramos allí varios peregrinos y entramos para descansar.
Los bocatas enormes, pan de calidad y el yogur artesanal con miel... ¡De vicio! Y todo a muy buen precio. La camarera muy agradable y se respiraba en general buen ambiente entre los peregrinos.

Comida casera riquísima. Trato y servicio muy bueno, super amables. Muy recomendable.

Paré en este restaurante para hacer un alto en el camino y descansar. No solo me prepararon el bocata más impresionante del camino, sino que la camarera me trató con mucho cariño y atención. Me dejaron comerlo en la zona del restaurante aunque no estaba abierta (era algo pronto). No pude terminar el bocadillo de lo grande que era y me dieron papel para envolverlo y poderlo disfrutar más adelante. Muchísimas gracias por vuestra atención y hospitalidad con el peregrino, de verdad, 10/10 👍👍👍

Como en casa, súper recomendado!!
Me encantó; fuimos un grupo de amigos y un bebé, Natalia es muy agradable, te hace sentir como en casa, nos trajo hasta un juguete para el bebé. De entrantes comimos unos champiñones rellenos exquisitos, almejas, pulpo y un tipo salpicón de marisco y pescado. Después carne a la piedra exquisita también. Esperamos volver pronto