Meson O Recuncho

Comida muy buena, un trato muy bueno también pero tienes que ir con paciencia para sentarte. Mucha gente y hay que hacer un poquito de cola si llegas tarde. Pero no ponen ningún problema es sacar alguna bebida a la calle mientras.
100% recomendable
También nos encantó el detalle del "pan" sin gluten e intentan evitar la contaminación cruzada en el cocinado.

Lo he intentado, pero no he conseguido sacarle nada negativo a este lugar.
Comida buenísima, original y correcta en abundancia. Servicio mucho más que bueno y local muy agradable, limpio y bien ordenado.

Tema de precios, yo los veo en la media, pero la relación calidad- precio es muy buena.

Nos ha gustado mucho el vino blanco "Pazos de Ulloa", que no lo conocíamos, así como los huevos rotos con pulpo (no te puedes ir de aquí sin probarlos) y los mejillones al vapor (para mi los mejores mejillones al vapor que he probado nunca).

Altamente recomendable en tu paso por la zona. No me gusta poner mucho 5 estrellas pero el sitio las merece.

Mesón muy acogedor, comida riquísima siempre que vengo a Viveiro es mi lugar preferido para comer.
Os recomiendo pulpo con huevos rotos esta exquisito, raxo con patatas riquisimo, tarta de queso y su especialidad tarta de nuez... Y muxisima variedad más que iremos probando... Camareros muy agradables.

Todo de 5🌟.
Tomamos almejas, ensalada de bonito, pulpo con patatas y huevos rotos y pulpo afeira.
De postre requesón y tarta especial de nueces.
Sólo puedo decir "SUBLIME"
Además del exquisito trato.
Volveremos.💙
Gracias por todo.

Comida muy buena, el pulpo lo mejor. El trato de los camareros es excelente. Además, el local es muy acogedor, tiene varias de sus paredes llenas de monedas colocadas por los clientes, todo un reto poner la tuya. Sin duda es un lugar al que volveremos.

Un sitio agradable, limpio, muy buen trato , rapidez , sin duda un acierto .
Las zamburiñas con su salsa increíbles , con ganas de haber probado las almejas . Nos recomendaron el postre de tarta de la abuela e increíble también .

Un sitio pequeñito, siempre lleno, con siete camareros trabajando a mil por hora y siempre con algo en las manos ¿Por qué hay siempre gente esperando para entrar? Porque las zamburiñas son de otro planeta, el pescado es de flipar, las raciones grandes, los precios sin sorpresas, el vino estupendo, la atención amabilísima y eficaz y las ganas de volver, incontenibles.
Maravilloso, sencillamente maravilloso.

Todo está riquísimo. Probé uno de sus platos estrella, pulpo con huevos ritos y patatas. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto de una comida. Sensacional.