BLACK OLIVE GRILL HOUSE

Solo vale la pena las vistas.
La comida no es nada del otro mundo.
Tardan una eternidad en servir y el dueño y algunos camareros van sin mascarilla todo el rato. Poco profesionales y desorganizados.
Un plato de pescado con almejas llevaba 2 ALMEJAS solo…. Definitivamente no lo recomiendo en absoluto

Estuve cenando con mi pareja, el servicio fue muy bueno el jefe salio a saludarnos y recomendarnos algunos platos, al final pedimos una gambs en gabardina, saco o algo asi de queso que estaba buenisimo y un arroz a banda para terminar, no pudimos terminr el arroz porque los platos estan bastante bien de cantidad, la comida muy rica y buena presentación, repetiré con mis padres ya que el local y las vistas de este les encantarán

Una pena la poca seriedad. Reservamos esta tarde para cenar a las 21:30 horas una mesa concreta. Cuando hemos llegado estaba ocupada y la respuesta en primer lugar del camarero es que el jefe había sentado ahí a esa gente. Luego había sido culpa de una camarera nueva que no sabía... La solución era ponernos una mesa en el lugar de paso de gente y camareros para el servicio de otras mesas. No estamos en un momento adecuado para ello, cumpla o no cumpla el aforo en terraza marcado por la normativa vigente. Lamentablemente lo desagradable es la falta de seriedad. Eramos una mesa de cuatro y desde luego a la jefatura del local le interesaba más una mesa de más gente, por eso los sentó ahí. No puedo valorar la comida ni las bebidas. Gracias al jefe por salir a dar explicaciones aunque sus explicaciones fuesen para responsabilizar a terceros, a una camarera, dar la misma solución de colocar la mesa en un lugar de paso o cenar una hora más tarde, ofrecerse a invitar a unas bebidas... Al menos algo es algo... Pongo mínimo una estrella, pero ojalá se pudieran poner 0.

10 estrellas!!! Lo mejor que hemos probado !!
Hemos dudado al entrar porque hay que subir a un primer piso, pero claro, la mejor vista está arriba, da igual terraza o interior, todo vistas al golf.
La comida es exquisita, da igual lo que pidas, carne, pescado, risotto, huevos... y el pato está de morirse!!!!
Y el servicio corre que vuela además de ser encantador. Sin duda todo un descubrimiento!!!
Mañana repetimos y seguimos probando platos.

Llegamos a las 22h sin reserva, restaurante prácticamente vacío. La mujer que nos atiende nos da a entender que vamos a poder cenar, rápidamente desde la otra punta de la sala y con bastantes malas formas, un camarero le dice a la mujer que no, y que nos diga que nos vayamos, se lo dice en inglés.
Por suerte, entendimos toda su conversación.
Atención al cliente pésima.

Servicio lento, la calidad de la comida no es buena y los precios muy elevados. Deben mejorar mucho

Impresentables. La avaricia les lleva a saltar una reserva para sentar otra mesa de más comensales.

Buen menú servicio y personal amable