La Marina Restaurante

Comida y atención insuperable. Y el dueño Paco tan atento como siempre. Y para el próximo año que coincidan los cumpleañeros. Muchas gracias.

Pues fuimos a comer con otra pareja de amigos donde llevaban dos niñas pequeñas, pedimos los menús infinitos esos que dicen que puedes repetir todo lo que quieras por el precio, pues terminas pagando 25€ para una croqueta un buñuelo y así sucesivamente ya que o repites o te quedas con hambre, las almejas llevaban arenilla aún, no estaban bien limpias, encima para las nenas pedimos un plato fuera de esa carta y encima a la hora de pagar nos hacen pagar nuestros menús y de ellos hacen descuento de la mitad del menú nuestro por las niñas porque nos dejamos caldero y la más pequeña comió un poco de el, bueno flipante! Nosotros no volveremos más además que el servicio pésimo, llamabas al camarero para pedirle algo y volvía media hora más tarde y si eso porque no se acordaba. Le pedimos un café y nos puso otro.

Un menú ilimitado de 50 eu, que puedes repetir de todo y que no puedas hacerlo de unos postres y un café.....ummmmmmmmm...

La comida bastante aceptable, el servicio (camarer@s) excelente....

Que en una mesa de 6 personas con el menú de 50 eu no puedas repetir postres (raciones pequeñitas) por 300 eu....FALLO GRANDE Y BIEN GORDO!!!

CUANDO ESO LO SOLUCIONEN DE 8.5 A 9!!!

MIENTRAS 5 REPELADO POR UN FALLO GARRAFAL COMO ESE!!

Recomendable la visita...

Fenomenal menú del día, con lentejas y boquerones fritos. Para cerrar un par de tortillitas de camarones que estaban de lujo. Muy recomendable

Fatal, la gente encantadora, la calidad malísima, al menos en el menú grande, todo congelado y poca historia, las camareras lo mejor, el resto mejor ir a un work, calidad precio igual bien pero si sabes lo que ofrece ,pero como fuimos por recomendación de pescado fresco y las reseñas mal
He cambiado las estrellas porque no hay manera de publicar

Servicio descordinado. Si vas en grupo tienes que pedir el mismo menú que todos los demás. Tras una discusión con el camarero vino el encargado y llegamos a un acuerdo para poder tomar algo diferente. Pero pedimos carne de la carta y no tienen la salsa. Y para colmo un huevo frito crudo y patatas a medio hacer

Menú de 25€. De marisco: langostinos y navajas que no apetecen repetir. Recomendación: que retiren de la carta el revuelto de patatas, huevo, gulas y pimiento morrón, sobre todo si lo sirven tibio.

Un sitio estupendo un trato personal y comida típica para paladares requisitos. Niko fue muy amable y profesional