Que bo que esta
Carrer de Lebón, 7, 46023 Valencia, España
4
96 reseñas
8 comentarios
FJ7X+HQ Valencia, España
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Lunes: 9–14
Martes: 9–16
Miércoles: 9–16
Jueves: 9–16
Viernes: 9–16
Sábado: 10–15
Domingo: Cerrado
Martes: 9–16
Miércoles: 9–16
Jueves: 9–16
Viernes: 9–16
Sábado: 10–15
Domingo: Cerrado
Somos tres amigos que solemos juntarnos los sábados para almorzar, y esa semana ibamos a almorzar el Ana III (que ya conociamos y que por 7€ se almuerza de P.M. con bebida y café) y nos encontramos que estaba cerrado por vacaciones. Para no irnos de la zona sin almorzar, vimos a pocos metros este bar que anunciaba bocadillos gigantes de todo tipo, incluidos los de carne de caballo, además de muchos tipos de comidas. Pensamos que era uno de esos bares que hay junto a otros conocidos, que intentan imitarlos, y que viven de lo que no dan abasto estos, ofreciendo una calidad aceptable a un precio económico. Nada mas alejado de la realidad como os voy a relatar.
El exterior está completamente lleno de todo tipo de carteles de almuerzos y comidas con sus precios, pero en tal cantidad que no es posible aclarse de que es cada cosa, dando la impresión de que los almuerzos son a 6-7€ (como en el Ana III), en función de la mezcla que se elija.
Nos metimos en el bar y lo primero que nos encontramos es que no estaba el aire acondicionado encendido, pese a que en la calle estabamos a 33º (y dentro a poco menos), y que no habian mas que 2 clientes en el bar a las 11 de la mañana. Como vieron que nos ibamos a marchar nos dijeron que lo iban a poner en marcha, como se supone que hicieron, aunque no se notó porque enchufaron solo uno muy pequeño en la entrada.
Pedimos tres bocadillos, uno gigante (que resultan ser una barra de 1/4) de carne de caballo con ajos, otro gigante de dos ingredientes, y medio bocadillo mas de carne de caballo con no recuerdo que variedad de queso.
Nos sentamos en la mesa a esperar, momento en el cual nos dimos cuenta que la higiene del local es bastante deficiente.
Nos sirvieron los bocadillos (que siendo justos hay que decir que estaban bastante buenos, aunque son de menor tamaño que los del bar imitado) un platito de olivas, unos pocos cacaos, así como una botella de vino de la casa y una de gaseosa que pedimos para beber los tres.
Cuando teminamos de comer los bocatas pedimos dos cafés, un carajillo, además de una copa de orujo de hierbas para cada uno.
Al final pedimos la cuenta y nos cobraron 43€ por los 2,5 almuerzos y las tres copas. ¡¡¡Casi 15€ por cabeza!!!. Al pedirle explicaciones nos dijeron que es que habiamos cambiado algún ingrediente de los bocadillos estándar de su carta (a uno le dijimos que añadiese cebolla y a otro unas cuantas patatas fritas), por lo que nos salió mas caro incluso que una comida completa en cualquier bar, e incluso mas caro que un menú estándar en muchos bufet libre.
Esa misma tarde al juntarnos con otros amigos y comentarlo me recordaron que ya me lo habían advertido porque a ellos les había pasado algo parecido, pero yo no lo habia relacionado con este bar.
Lo dicho, barato porque solo va a ser una vez, ya que por mucho que intento hacer las cuentas no me salen.