Buteko Restaurante

Local agradable, con un personal atento y amable. Muy buenas tapas, cantidad y calidad. Para repetir sin dudarlo.

Restaurante de tapeo con algo de influencia brasileña. Tienen desde las tapas más típicas a mariscos y carnes maduradas.
Las bravas las encontramos normalitas con una la salsa rosa un poco sosa.
Las cosiñas de yuca curiosas, pero me quedo con las croquetas que nos gustaron mucho, crujentes por fuera y jugositas por dentro.
Solo les quedaban de cabrales así que otro día habrá que ir a probar otros sabores. 😁
la pururuca, una versión brasileña del torrezno estaba bien también, me sorprendió más la yuca frita de acompañamiento que estaba muy buena. Probaremos de hacer una versión de yucas bravas con alguna salsita picante con ají o similar en casa,..
El revuelto ge gulas con su punto de ajito, patatas y huevo también nos gustó.
Conclusión hay que volver a investigar más platos de la carta. Muy recomendable con buen ambiente y buen servicio.

Muy bien. Ya había estado, esta a sido la 2a vez que voy. Muy buena la comida.

Hemos llegado a las 22 y hasta las 23 aproximadamente no han empezado a llegar los platos, a todo esto no han tomado bien la nota y empezaban a llegar platos equivocados, una longaniza a la brasa ha tardado 1 hora y cuarto en llegar a la mesa y a destacar un pan integral de el dia anterior para acompañar.. en resumen horrible. Camareros muy despistados, aunque lo poco que hemos podido probar estaba correcto.

Fuimos a cenar este lunes con unos amigos que ya son habituales del restaurante y querian compartir con nosotros la buena comida, el magnifico trato, la buena calidad de las tapas, buen vino, y recomendado todo al 100./. Pero para remarcar un postre diremos que el mousse de maracuya BRUTAL. Toda la comida es casera y hecha con mucho amor. Lo haremos nuestro restaurante de referencia.

Es un restaurante situado frente al rio Segre, en la parte de Cappont, cerca de los Campos Eliseos.
El local no destaca por nada, ordenado, sobrio…
La carta está en unas pizarras. A simple vista se ve que es un bar de tapas.
Allá donde vaya, me gusta probar las bravas. Están bien. Luego pedimos unas croquetas variadas, que estaban bastante buenas. Lacón que lo sirven como el pulpo a la gallega, con una base de patata, el lacón con pimentón, sal y aceite. Para el precio de la tapa, lo vi muy escaso. También pedimos pa de vidre con tomate. Por último nos llamó la atención unos ceps a la llauna. La tapa costaba 16€, y las expectativas fueron mayores que la realidad. No dejan de ser unas setas fritas en sartén que las pasan a una llauna de cargols para presentarlas en mesa. No recomiendo esta tapa para nada.
De postre un tiramisú, que sirven en copa. Estaba bueno. No le pongo ninguna pega.
De beber nos decantamos por una botella de vino tinto de Costers del Segre. No es una carta muy extensa, donde echamos a faltar un poco más de variedad.
La cena para dos nos costó 73€.
La calidad de la comida es buena, pero el precio lo veo muy elevado para tratarse de 4 tapas bastante simples.
El servicio fue correcto y a tiempo.

Restaurante muy acogedor. La comida buenisima. Ningún plato te decepciona. Los postres caseros. Creusa un encanto de mujer.
Sitio para comer calidad

Un lugar donde puedes comer muy bien y el trato inmejorable.