Empordà Restaurante

Nos encantó, platos muy bien presentados. La comida muy buena tal y como se ve en las fotos de la carta. El personal muy amable y atento. La decoración del local muy chula. Recomiendo

El restaurante llama mucho la atención por su enorme terraza que está decorada a estilo ibicenco, con detalles bonitos y agradables a la vista. La carta es amplia y con múltiples opciones para elegir, compartir y hacer miles de piruetas si se va en grupo, sólo, en pareja o un batallón entero. El servicio es muy amable y rápido y aunque casi siempre está lleno (conviene reservar), la comida no me acaba de convencer. Los platos al igual que la decoración, la carta y el entorno; entran por la vista, pero quizás al probarlos, no es lo que esperas. No llegas a percibir los verdaderos y genuinos sabores del marisco, los pescados y demás productos del mar. Quizás nos equivocamos en la elección, pero no terminó de convencernos, sólo los postres y el vino rosado remataron positivamente una comida mediocre. Habrá que volver y procurar mejorar la puntuación. 🫤🥺

Local agradable, bien decorado y con amplia terraza con bonita ambientación de corte ibicenco. Amplia carta con múltiples opciones y en varios idiomas. Servicio rápido, atento y servicial. Los pescados de buena calidad y bien elaborados y presentados, pero el marisco algo escaso de sabor. Buena carta de vinos y de postres.

Restaurante precioso estilo ibicenco a pie de playa, camareros muy atentos y comida espectacular con muy buena calidad y buenos precios. Hay desde tapas, carnes, pescado, pizzas y combinados. Volveré sin dudarlo encantada 🤩

Las bravas buenísimas, la Tabla Catalana, que supuestamente es una tabla de embutidos ibéricos ha resultado una estafa. No tenía nada que ver con las fotos ni de la carta ni de otras subidas en otras reseñas, y de ibéricos no tenían nada esos embutidos, de hecho son más buenos los de supermercado. Una pena pagar 37€ que cuesta la tabla por algo que no vale ni un tercio de ese precio.

No volveremos.

La comida buenísima, el servicio atento, el lugar excepcional y las vistas y compañía maravilloso

Fuimos 2 parejas con 5 niños. Los niños disfrutaron en la zona de juegos repleta de inflables y colchonetas. La comida muy correcta y lo mejor la atencion del personal que en todo momento nos hicieron sentirnos como en casa, muy atentos, super simpáticos con los niños hasta incluso se ofrecieron a cortar la carne de los niños a trocitos para que nosotros no nos molestaramos...

Vale la pena, por tal de cenar tranquilamente y ver como los peques se lo pasan pipa...

Disfrutadlo

Delicioso el pulpo a la Gallega, pude disfrutar también (en diferentes días 😜) de una bandeja de pescados, paella de mariscos, y todo tiene un buen sabor.
El local tiene amplias terrazas, con vista al mar, donde la brisa marina hace que disfrutes de la comida. El personal es atento y rápido al servir. Tienes que probar los helados que tienen de postre, como la "Dama Blanca"