Restaurant Rubell

Buen restaurante, comida casolana Catalana, jamón muy bueno, costillititas rebozadas una delicia precio asequible. (Precio medio por persona a junio 2022 de unos 37€) , llamar para reservar siempre está lleno.

Es un restaurante que está situado en el mismo pueblo de Ministrol de Caldera, es muy amplio y tiene una maravillosa terraza que se está muy agusto, desde allí se ve el campanario del pueblo, con el río que lo rodea. Se come de lujo, a la carta o de menú, el precio es muy asequible por 13€ comida en cantidad, no lo terminas. El servicio es muy bueno, el personal es muy agradable.

Super buena atención, comida de calidad en un pueblo maravilloso,recomendable 100%

Hemos comido muy bien y a un buen precio muy amable todo el personal

Comida tradicional muy bien cocinada .todo buenísimo. Lo canelones,la paella (genial)... se puede comer en la terraza que se está súper bien.El camarero muy atento Josep M°.

Me cuesta dar las 5 estrellas a un restaurante, pero creo que lo tienen merecido. La cocina es tradicional, de la iaia. Sabores dificiles de encontrar fácilmente, de los de antes.
Buena relación calidad, precio. Raciones generosas.
Excelente servicio desde el minuto 0 que llamas para reservar. Incluso el personal más joven, ofrece un trato y una educación exquisita.
Las vistas elevadas de la terraza al campanario son inmejorables.

Fuimos a comer 4 personas, por la mañana miramos precio menú en su web, estaba a 27€, al presentarnos el menú el precio estaba en 29€. Hablamos con el jefe y muy amablemente nos dijo que no habían tenido tiempo de modificarlo y que solo eran 2€, yo insistí en que si solo eran 2€ después del error lo podrían tener en cuenta, me dijo que habían tenido mucho trabajo. Si tienen tiempo para imprimir cartas nuevas no les hubiera costado arreglar precio en su web. Restaurante de mucho prestigio nos pareció cuartelero debido a su masificación y camareros/as estresados.

Ahun así estando en la lejanía se respira un trato buenísimo y como no, con un producto a la altura.
Es un servicio clásico que te transporta y con unos sabores en los platos que te hacen sentir el territorio, yo lo recomiendo