Puede mejorar mas si la reparación es en el momento te lo solucionan rapido pero si es algo un poco importante te dan las uvas yo tengo un coche hay desde el 3 de diciembre para cambiarle la direccion y hasta hoy dia 7 de agosto estan esperando a que llegue la pieza debe venir andando desde corea por eso no lo arreglaron todavía yo creo que la pieza esta dandose unas vacaciones y conociendo mundo
Ángel Pérez2 años atrás
Extraordiaria. Muy bien el trabajo realizado.
Vale Mar2 años atrás
no Recomendable, pintura regular más bien chapuza,de mecánica poca idea! si habré el motor le sobraba piezas y tornillos. no Recomendaría.
Jose Luis G2 años atrás
Les llevé un coche de una familar para reparar una burbuja de corrosión en el capó.
La "taparon" malamente en lugar de sanear bien y soldar un trozo de chapa en el lugar dañado por la corrosión y se vió a las pocas semanas que volvió a salir la burbuja de corrosión tras pintar el capó entero.
El color quedó bastante distinto al color del resto del coche. Pintó un poco en un sitio la goma de junto a la luna delantera pero por eso no dije nada porque la limpié yo. Lo peor fué que a las pocas semanas volvió a salir la burbuja de corrosión, dinero gastado para nada.
Dijo el propio chapista que estaba en garantía la reparación; pero solo lo dijo para salir del paso. Me preguntó entonces a mí el código de pintura del coche. No cumplieron la garantía ni supe nada más de ellos.
Reparando otras partes del vehículo no volvieron a poner las grapas, tornillos y plásticos del coche, debieron sobrarles piezas, y las tirarían. Deben saber más que el fabricante y tiran las piezas que estiman innecesarias.
El ventilador de la calefacción duró cuatro meses tras repararlo para llevarlo a ITV y eso que el coche casi ni se usa.
Las reparaciones no duran tiempo ni se hacen con calidad, intencionalmente o no, no lo sé.
Y eso que siempre pagué íntegramente al momento, aunque quedasen mal reparadas las cosas, tal vez fué mi error.
La filosofía en la mayoría de los casos debe ser acabar rápido y poner la mano.
En un primer momento igual no te das cuenta, pero más tarde ves que lo "barato" sale caro, sobre todo en trabajos de chapistería.
No es agradable que te dejen así un coche que fué regalo de un familiar que ya no está y se quiere conservar con independencia del valor comercial que pueda tener.
Guillermo Fernandez Llano2 años atrás
Buen trato y trabajan muy bien,sin duda muy recomendable.
Marian Garcia2 años atrás
Muy buenos profesionales, atención exquisita, cumplen con los tiempos previstos. Para recomendar!!
no Recomendaría.
La "taparon" malamente en lugar de sanear bien y soldar un trozo de chapa en el lugar dañado por la corrosión y se vió a las pocas semanas que volvió a salir la burbuja de corrosión tras pintar el capó entero.
El color quedó bastante distinto al color del resto del coche.
Pintó un poco en un sitio la goma de junto a la luna delantera pero por eso no dije nada porque la limpié yo.
Lo peor fué que a las pocas semanas volvió a salir la burbuja de corrosión, dinero gastado para nada.
Dijo el propio chapista que estaba en garantía la reparación; pero solo lo dijo para salir del paso. Me preguntó entonces a mí el código de pintura del coche. No cumplieron la garantía ni supe nada más de ellos.
Reparando otras partes del vehículo no volvieron a poner las grapas, tornillos y plásticos del coche, debieron sobrarles piezas, y las tirarían.
Deben saber más que el fabricante y tiran las piezas que estiman innecesarias.
El ventilador de la calefacción duró cuatro meses tras repararlo para llevarlo a ITV y eso que el coche casi ni se usa.
Las reparaciones no duran tiempo ni se hacen con calidad, intencionalmente o no, no lo sé.
Y eso que siempre pagué íntegramente al momento, aunque quedasen mal reparadas las cosas, tal vez fué mi error.
La filosofía en la mayoría de los casos debe ser acabar rápido y poner la mano.
En un primer momento igual no te das cuenta, pero más tarde ves que lo "barato" sale caro, sobre todo en trabajos de chapistería.
No es agradable que te dejen así un coche que fué regalo de un familiar que ya no está y se quiere conservar con independencia del valor comercial que pueda tener.