Tienda Orange
P.º Estación, 3, 16400 Tarancón, Cuenca, España
3
45 reseñas
8 comentarios
2X6V+44 Tarancón, España
Reportar ubicación
Reclama esta ubicación
Lunes: 10–14
Martes: 10–14
Miércoles: 10–14
Jueves: 10–14
Viernes: 10–14
Sábado: 10–14
Domingo: Cerrado
Martes: 10–14
Miércoles: 10–14
Jueves: 10–14
Viernes: 10–14
Sábado: 10–14
Domingo: Cerrado
Mi padre acudió a esta tienda para agrupar su número de teléfono al de mi madre y la fibra de casa. Para ello tenía que hacer un cambio de titular a nombre de mi madre. Desde la tienda lo gestionan pero, por falta de tiempo por su parte, se queda en firmar los contratos la semana siguiente. En esa semana mi padre enferma de Covid y desgraciadamente en un intervalo muy corto de tiempo fallece.
Días después nos ponemos en contacto con la tienda para dar de baja su número. Desde la tienda se nos indica que tiene permanencia y que al haber cambiado el número a nombre de mi madre no se puede alegar causa mayor y tenemos que seguir pagando la línea durante casi un año. En ese momento recordamos que el contrato no se llegó a firmar y pedimos a la tienda, que ya que no se ha firmado, si pueden solucionarlo para que mi madre no tenga que estar pagando la línea que desgraciadamente ya no se va a usar. Esta empleada en concreto me dice que da igual que no esté firmado, que la gestión ya se ha hecho y que hay que pagar la línea.
Con decepción y enfado por el trato que me estaban dando en un momento así, le indico que cómo es posible haber hecho un cambio de titular sin estar firmado el documento. Poniéndose nerviosa me dice que mis padres estuvieron allí y que tiene imágenes de las cámaras, que si me parece bonito estar haciendo algo así en ese momento y acto seguido me colgó.
Sirva esta reseña para que conozcan un poco a la persona que les va a atender en este establecimiento, ya que no solo realiza acciones ilegales al dar de alta contratos no firmados, amenaza con usar imágenes que por LOPD no puede usar, unido a una total falta de empatía ante una situación personal que nadie quiere vivir. Nada en contra de la compañía, que posteriormente por teléfono, me ofreció una solución bastante más humana.