FARO DE "AJO"

Sitio increíble para caminar por los acantilados. Vistas maravillosas y de muy fácil transitar. Caminos muy fáciles, limpio y precioso. El faro es muy curioso. Con colores increíbles. La entrada es gratuita pero controlada. Cierra a las 20:00 de la tarde. Hay bancos para descansar. Pasamanos y prismáticos fijos gratuitos.

El sitio es espectacular, la ruta es fácil, se complica un poquito si vas a la Ojerada por el sendero, se va bien pero algún tramo hay que tener cuidado. Los acantilados son una maravilla y más si vas en día nublado y el mar revuelto. Lo que nos pasó a la vuelta es que estaba cerrado el faro y a un grupo con niños pequeños y perro y a nosotras nos tocó saltar la valla (nada baja). Es cierto que hay un horario, que tampoco entiendo, porque no cobran entrada y es un sitio público, pero se nos pasó mirar la hora y llegamos 5 minutos tarde.

Para un paseo de domingo está bien .camino cerrado para rodear el faro muy colorido y vistoso. No serán más de quinientos. Metros de paseo a menos que te saltes Todos los carteles y te vayas hasta los acantilados cosa que ocurre demasiado a menudo.
Poco más visualmente vistoso por el colorido del artista y una buena vista de la costa.
Si vas a Ajo pues te pasas y lo ves que además es gratis

Faro muy original, colorido y vistoso, que merece mucho la pena visitar. Lo circunda un sendero acotado desde donde se divisa acantilados donde rompe el Cantábrico. También cada x metros hay catalejos-prismáticos gratuitos para contemplar el mar. En la entrada al sendero hay diversas kioskos donde comprar algún recuerdo o tomar algún refresco o helado. Se llega bien en coche y hay bastante sitio para aparcar, al menos en la época en que fue (septiembre)

Que bonito el faro así pintado. A media hora de Santander, se puede llegar muy cerca con el coche, hay bastante sitio donde aparcar. Está todo muy bien cuidado y adecentado, camino de piedras pero se anda muy bien incluso son carritos de niño. Hay unas vistas muy bonitas del mar cantábrico. Se puede pasear y sentarse a disfrutar del paisaje.

Soy una amante de los faros, y este me encantó. Nunca había visto ninguno pintado y tan alegre. A parte te puedes dar un paseo y ver los acantilados y la costa cántabra que es muy bonita

Un faro muy original. Pintado al estilo vanguardista.
Buenas vistas de los acantilados.
Esta muy bien señalizada la senda.
Lo que se echa en falta son unos servicios públicos, por eso le doy 4 estrellas. Si quieres ir al baño te tienes que desplazar 500 metros al bar del camping de Ajo.

Divertidisimo. Me ha gustado mucho la experiencia de visitarlo y descubrir ese entorno tan maravilloso de la costa cántabra.

Fuimos para comprobar las críticas de la actuación y la polémica con el arte, el entorno y las infraestructuras. Bueno... para gustos los colores. Nunca mejor dicho.

La realidad es que ha revitalizado las visitas al pueblo y su costa. Tanto que hasta yo fui a verlo.

El camino al faro y al entorno está preparado con una pista de grava. La gente que lo visita son familias, parejas, instagramers y demás. Me encantó disfrutar de tan grata compañía y observar la fauna humana que se hace fotos de boda en el entorno. Maravilloso. Por fin tuve la oportunidad de ver posibles protagonistas de titulares como: Novia muere el día de se boda. Familia muere despeñada al hacerse un selfie. Etc.

Un filón para los premios Darwin que afortunadamente no se entregaron a nadie de los anónimos con los que comparti mi visita.

El camino termina con una cuerda. Pero continuamos siguiendo al glamour cántabro. No tiene desperdicio. El entrono natural es preciosos y los humanos damos un espectáculo fabuloso. Hasta las vacas lo disfrutan viéndonos.

Yo aconsejo visitarlo. SIN DUDA.

Un saludo,