Arco de San Gil

Una de las puertas de la antigua muralla de Burgos, reformada en el S XVI.
Muy cerca se sube a la iglesia de S.Gil Abad. De hecho en tiempos parece que estaban comunicados.

Una puerta más de entrada de la ciudad vieja que se conserva en buen estado.
Lugar de la visita: Arco de San Gil
Fecha de la visita: 11/12/2017
Este Arco que se encuentra pegado a la Iglesia del mismo nombre, era la puerta de entrada a Burgos desde el Norte.
Se encuentra en muy buen estado porque en su momento sufrió una profunda remodelación.
Llegó a usarse como cárcel, entre otros usos.

Una de las antiguas puertas de entrada a la ciudad amurallada de Burgos. Junto al Arco Santa María, es uno de los mejores conservados.

El arco de San Gil es una antigua puerta de la muralla de la ciudad, que desempeñaba funciones de torre defensiva y de prisión.

Rincón incomparable del casco histórico. Una pena la obra que están haciendo en la subida de la iglesia San Gil. Se han metido mucho más que antes. No se ve la iglesia como se veía antes de la obra. De quién será amigo el constructor.

Este arco era una de las puertas de la muralla de la ciudad por la parte norte de Burgos.

Arco de acceso a la ciudad y anexo a la iglesia del mismo nombre. El torreón con el que contaba desaparece en el s. XVI, sufriendo el arco otra reforma en el dieciocho. En esta parte la muralla alcanzaba su mayor altura y era dónde más torres había. El torreón servía de prisión y para reclusión de las Mujeres llamadas emparedadas que se retiraban de la vida mundana a la meditación. El arco comunicaba con la iglesia mediante una escalera. En las cercanías había varios conventos extramuros hoy desaparecidos.

No te puedes ir de Burgos sin tomarte una Hilda o cualquier otro tipo de pincho en el Orfeón burgalés. Mítico lugar con una barra única de banderillas bien elaboradas y situado en un lugar estratégico
El trato es buenísimo y está muy limpio