El Soguero

Comimos muy bien, fuimos con nuestro bebé y estuvieron muy atentos a nuestras necesidades y las de nuestro pequeño.

Las recomendaciones sobre la carta fueron muy acertadas. La carne (solomillo) y el postre (flan de dos chocolates) espectaculares.

El restaurante muy limpio y el servicio ágil y atento.

Muy recomendable si estás por la zona.

Como aspecto a mejorar, podrían añadir un cambiador en el baño.

Restaurante antes de llegar a Albarracín, en Teruel. Relacion calidad-precio buena. Hay menú del día a pesar de haber venido en jueves santo, a 18€ con mucha variedad de platos. Hemos pedido lasaña y judías de primero; dos churrascos de segundo y un plato de carta de ternasco de Aragón. El menú incluye postre y café (cuando generalmente sólo incluye postre o café. Los postres caseros y contundentes.
El trato del personal es bueno cercano, rápido y amable.
Finalmente hemos pagado entre tres personas: 64€ en total y ha sido muy satisfactorio el rato que hemos pasado.

Una valoración en la que me faltan estrellas para valorar. Trato, precio y comida fabulosa y rica. Repetiremos ya que un lugar donde los espacios entre comensales son adecuados, los tiempos entre los platos son sin esperas excesivas, y el personal excelente.

Fuimos a comer por trabajo, recomendados por el cliente y la verdad es que comimos de maravilla, los platos muy ricos y elaborados y calidad precio excelente, volveremos

Desde que entramos en el local hasta que salimos fue todo excelente.
El comedor amplio y la separación entre comensales el correcto y todo bien iluminado y ventilado.
El servicio perfecto, rápido, amable y muy atento.
Nos sirvieron un entrante por cortesía de la casa.
La bebida la sirvieron en botella de cristal, la abrieron delante nuestra y vasos con hielo y limón. Parece una tontería pero no todos saben servir un simple refresco.
La comida es un manjar...todo lo que nos sirvieron estaba buenísimo y las raciones generosas.
La cuenta para lo que consumimos y la calidad de todo fue BARATA. No dudaré en volver, 100% recomendable.

Menú del día muy completo, con mucha variedad de platos y excelente combinación de sabores. Muy recomendable. Además, el servicio es muy rápido, amable y atento.
Pd: Gracias a la pinché de cocina por sacrificar su ración de tarta de queso.

Nefasta experiencia para empezar el fin de semana, llegamos con intención de almorzar 9 personas y nos indican que no tienen para dar el servicio con lo que en el mismo pueblo compramos en el horno algo de comer y volvemos para preguntar si podíamos comerlo allí y consumir bebidas y cafés etc 9 personas a lo que responden que si, juntando las mesas y pidiendo cada cual su bebida y cuando nos disponemos a comer sale una persona de la cocina a decirnos que no le parecía bien a lo que decimos que pedimos permiso y nos dijeron que si podíamos en ese momento empezó a faltar el respecto de malas formas así que pedimos la cuenta (sin consumir) y la hoja de reclamaciones, se negaron a darnos la hoja echándonos del local y con amenazas de llamar a la guardia civil, bajando la persiana con intención de retenernos allí hecho grave ya que sólo queríamos pagar y la hoja para irnos dejar constancia de los hechos y que los visitantes próximos no pasen el mal trago que tuvimos.
Que pena el mal servicio y la mala atención en un pueblo pequeño donde por lo general la gente suele ser encantadora con los visitantes.

Un auténtico sorpresón.
Entramos para comer algo, pasadas la 3 de la tarde, y cuando nos hicieron pasar al salón del restaurante nos quedamos atónitos con su gran dimensión, inapreciable desde fuera.
Pero lo mejor estaba por llegar: la comida superaba con creces el impacto del tamaño del salón. Menú del día con variedad, buena presentación y calidad, a buen precio.
Recomiendo las migas de pastor y la lasaña fría de atún, aparte de los postres.
Ah, y que no se me olvide, con un trato excepcional.