Hostel O Miño

Hostel en pleno centro de Lugo, al lado de la catedral, calle de los vinos, excelente ubicación. Las habitaciones geniales, hemos estado 3 días y espectacular, las vistas de la habitación alas montañas y la catedral, todo muí bien, muí limpio, moderno... En la parte de abajo el bar, vermouth caseros riquísimos tapas para acompañar abundantes,, cócteles con preparación casera, la atención de Luisa y Jorge espectacular, atentos en todo momento de si necesitábamos algo. En fin que más decir solo que descubráis este sitio tanto si viajáis a Lugo o si estáis por la zona ir a tomar algo

No voy a valorar este local como Hostel porque solo he ido por la noche a su bar abriendo como pub... y como pub decir que una pena que contraten a gente tan maleducada de porteros. De muy malas formas nos han pedido explicaciones de a donde íbamos, que si íbamos a ir al wc .... que solo nos dejaba entraba si consumíamos ... está claro que si había alguna oportunidad de que 4 personas consumiéramos durante toda la noche... ya con eso desaparecieron.

Abren como pub. Tratamos de entrar por curiosidad ya que era la primera vez que lo veíamos. Nos paró una persona muy maleducada que decía ser el portero para decirnos que no fuésemos a mear y que no nos dejaba pasar a menos que hiciésemos una consumición. No volveremos.

Gente muy maja y nos salvaron la vida buscando en pleno San Froilán. Son pisos que alquilas habitación, compartes baño y cocina con otra gente. No se oye el ruido, está bien insonorizado. Nuestra habitación no tenía ventana pero puede haber en otras. Muy céntrico y barato.

Hostel en todo el centro de la ciudad de Lugo, con todo tipo de detalle, limpieza y cuidado en todas las estancias, sin contar con el maravilloso trato recibido por los empleados, tanto en el hostel como la vermutería que disponen a pue de calle con tapas fabulosas. Un 10 y por supuesto que volveremos

Por dentro no es nada del otro mundo, con lo que no vale la pena pasar por las faltas de respeto del portero. El trato es el que darían en un prostíbulo.

Falta de profesionalidad absoluta. La educación de la persona que estaba en la entrada el día de san Froilán deja mucho que desear.

No puedo opinar porque reservamos y al llegar sobre las 18:20 ni nos no contestó nadie ni al telefonillo ni al móvil.