Centro de Salud Infante Don Luis De Borbón

No cogen el teléfono. Se imaginan que llaman a los bomberos y hacen lo mismo? Pues a estos señores del ambulatorio se les permite y no pasa nada. Quien/es tengan responsabilidad en ello debería tomar cartas en el asunto. Me he personado en el Centro, les he hecho una llamada in situ enfrente del mostrador, no había nadie en el mostrador esperando y aún así la voz automática del contestador me dice que en estos momentos no pueden atenderme. Luego dirán que está mal la sanidad publica madrileña, con personal así nada puede funcionar bien.

He ido esta mañana. Nadie sabe lo que me ha costado llegar. La persona de ventanilla que me atiende me indica que ya NO existe servicio de urgencias en este centro, que tengo el médico por las tardes, que debe verme siempre mi médico y no otro. Ve que no estoy bien pero decide que puedo esperar y me da cita para mañana a las 7pm , me despacha con todo el desinterés del mundo mientras saluda alegremente a otros compañeros. Este trato no lo merece nadie, además pago una barbaridad de impuestos y no puedo acceder a la sanidad pública cuando más lo necesito por decisión de una persona sin criterio, sin empatía y sin humanidad. No es justo que tengamos que saturar las urgencias de Puerta del Hierro pero si no queda alternativa.... No es justo el trato prepotente que tienen en ventanilla con la gran mayoría de pacientes…Elevo la queja al ayuntamiento.

Califico la atención al cliente en recepción.
He ido hoy por primera vez al centro a recoger las tarjetas sanitarias que anteriormente había solicitado via on line.
Me ha atendido una chica de unos 50 años, con gafas y pelo ondulado con mechas a la altura del hombro.
He de decir que iba un poco a la espectactiva después de haber leído loa comentarios del centro pero mi experiencia ha sido muy buena.
Ya os digo, sólo con ése servicio, empleada y departamento.
Espero tardar en contaros mi experiencia con médicos y pediatras.
Por el servicio prestado hoy, le doy 5 estrellas porque la chica ha sido encantadora, agradable y servicial en todo momento. Ha sido un placer.
Gracias 🤗

Este es el ambulatorio donde todas las veces nos tratan mal a todos los pacientes. Ha de ser que no les gusta su trabajo. La sanidad madrileña debería hacer un estudio de satisfacción en este centro de salud.

Opinión para Montserrat Menéndez: Mala profesional, me ha atendido en un minuto con solo una persona esperando fuera y se ha negado a darme el justificante de descanso por estar de huelga con 39 de fiebre. Me ha dicho que volviera mañana. Con que caradura y poca empatía me hace volver por no gastar 2 minutos de su tiempo?

Prácticamente imposible contactar por teléfono, y pobre y tosca atención en el mostrador de recepción. No parece que les hayan transmitido de forma eficaz el concepto de servicio público. Mejor la atención médica y de enfermería, afortunadamente. Pero el promedio global es bajo. Una lástima el deterioro de la sanidad pública, y este centro no es más que el reflejo de ello

Tras 32 llamadas seguidas el lunes sin que nadie conteste al teléfono, termino optando por pedir cita telefónica curiosamente me Dan cita a las 9 de la mañana de hoy miércoles 12 de octubre festivo, estando enferma me levanto a esperar la llamada. Son las 11,30 y aquí sigo esperando. Es surrealista y de absoluta tomadura de pelo. Que feliz infancia aquella en que llamabas a tu medico y volaba a tu casa a visitarte si te encontrabas mal para desplazarte.

Atención y trato pésimo tanto por parte del personal de administración como del DOCTOR JARA.
Hace un mes pedimos cita para la revisión de los 4 años de mi hijo en el centro con su pediatra y enfermera. Nos dieron cita para el lunes 14 con el pediatra por la mañana y luego por la tarde con la enfermera, ya que era imposible que coincidieran ambos en el mismo horario. No pusimos problemas y nos quedamos con la cita. Una semana antes de que llegara el día 14 nos llamaron para cambiárnosla porque el DOCTOR JARA no iba a acudir ese día al centro. Al final nos citaron para el martes 15 por la tarde. Llegó el día de la cita y 30 min antes, cuando ya habíamos recogido antes a nuestro hijo del colegio e íbamos de camino, nos dejan un mensaje en el buzón de voz para decirnos que el DOCTOR JARA no va a acudir a su puesto de trabajo y que nos tenían que cambiar el día de nuevo. Acudimos aun así al mostrador para solicitar que algún otro pediatra vea al niño y así poder vacunarlo y no haber perdido el día para nada. Nos dicen que esperemos, que otra pediatra verá al niño para comprobar que se puede vacunar (aunque otro día tendríamos que volver a pasar la revisión) y luego pasar con la enfermera. Después de esperar más de una hora nos acercamos de nuevo a recepción para preguntar porque gente que llegó después que nosotros pasaba mucho antes y nos dicen que como no tenemos hora que tendremos que esperar a que la doctora considere oportuno llamarnos.
Al final cansados de esperar nos hemos ido sin ver a la pediatra y evidentemente sin la vacuna. Es una vergüenza que con la cita pedida con un mes de antelación, y un cambio entre medias , nos avisen 30 minutos antes de que su pediatra no va a ir. Solo hemos pasado cita una vez con el DOCTOR JARA (antes de la pandemia teníamos otra doctora que nos cambiaron sin motivo) y no va a haber una segunda vez. El problema no está solo en los fondos que se dedican a la sanidad pública, sino en los doctores que no quieren trabajar, que nunca están en el centro (con lo que nunca te dan citas ) y la única vez que te la dan te la suspende cuando vas de camino. Lo dicho una y no más.