En primer lugar, el trato cercano y amable de los propietarios. En segundo lugar, el entorno, que es espectacular. Teniendo en cuenta que se trata de un hotel rural sencillo, no puedes pretender encontrar grandes lujos. Todo limpio, buena ducha con agua caliente y estupenda calefacción. Desayuno rico y sobre todo el encontrarte como en casa, pero rodeado de naturaleza. Repetiremos. Un saludo a Javier y María.
Silvia Delgado2 años atrás
Lugar acogedor y tranquilo en plena naturaleza. Acceso por camino de tierra, con tramos en los que hay que tener cuidado si tienes un coche bajo. Habitaciones muy limpias y camas muy cómodas. Los dueños cercanos y atentos. Fuimos con nuestro bebé de 6 meses y nuestra perrita. 100 % recomendable.
Santiago Gamundi Rosendo2 años atrás
Un lugar muy tranquilo para poder descansar y disfrutar de los alrededores. En la finca prima el silencio y pudimos ver una de las noches estrelladas más bonitas de nuestras vidas gracias al ambiente.
Los dueños son muy simpáticos y ha sido muy agradable disfrutar de una cerveza mientras hablas con ellos y te cuentan las historias del pueblo, la finca y las suyas propias.
Repetiremos seguro.
Carmen Ruiz Hermosa Infantes2 años atrás
TOTALMENTE RECOMENDABLE. Magnífico sitio para descansar y poder moverte por la zona. Los dueños son encantadores y tratando de dispensar las mejores atenciones. Todo muy limpio. Desayuno sumamente completo.¡Gracias a María y a Javi: cómo en casa!
Jaramillo2 años atrás
Estuvimos dos días, y el trato fue exquisito, desayunamos allí y fenomenal, y la cena muy rica y a un precio razonable. Guisan muy bien, comimos un cordero riquísimo. Las camas cómodas y por poner una pega en Google no tienen bien señalizada la entrada, hay que entrar desde el pueblo.
Mariajose del rio2 años atrás
Lo elegimos sobre la marcha sin mirar demasiado y fue un acierto. Nos dejaron llevar a nuestra perrita, lo cual es de agradecer. Las habitaciones básicas, sin lujos ni TV, pero limpias y con buen colchón para garantizar un buen descanso, que es lo fundamental. Los dueños muy agradables, no te ponían pegas para nada. Cenamos allí y bastante bien, comida casera excepto los postres, y muy barata. El desayuno correcto: tostada, zumo natural, café y magdalena. El hotel está apartado del pueblo pero en una zona muy bonita en plena naturaleza. La finca tiene varios tipos de árboles frutales, y una terraza muy chula para épocas más calurosas. Situación muy buena para hacer rutas de senderismo y visitar los pueblos cercanos de Candeleda y Arenas De San Pedro.
Carlos costas2 años atrás
Un sitio muy tranquilo para desconectar, habitación amplia, limpia. El GPS no está muy acertado, porque para llegar hay que meterse por un camino de tierra, pero en buen estado. Los dueños muy amables en todo momento.
Cosmina Cozma2 años atrás
La atención del personal inmejorable. El sitio simple y muy limpio. El sitio es precioso, en plena naturaleza. Está a 15 minutos andando del pueblo, en paseo agradable. Tiene a Candeleda a 10 minutos en coche.
En segundo lugar, el entorno, que es espectacular.
Teniendo en cuenta que se trata de un hotel rural sencillo, no puedes pretender encontrar grandes lujos.
Todo limpio, buena ducha con agua caliente y estupenda calefacción.
Desayuno rico y sobre todo el encontrarte como en casa, pero rodeado de naturaleza.
Repetiremos.
Un saludo a Javier y María.
Los dueños son muy simpáticos y ha sido muy agradable disfrutar de una cerveza mientras hablas con ellos y te cuentan las historias del pueblo, la finca y las suyas propias.
Repetiremos seguro.
dueños son encantadores y tratando de dispensar las mejores atenciones. Todo muy limpio. Desayuno sumamente completo.¡Gracias a María
y a Javi: cómo en casa!
Guisan muy bien, comimos un cordero riquísimo.
Las camas cómodas y por poner una pega en Google no tienen bien señalizada la entrada, hay que entrar desde el pueblo.
Las habitaciones básicas, sin lujos ni TV, pero limpias y con buen colchón para garantizar un buen descanso, que es lo fundamental.
Los dueños muy agradables, no te ponían pegas para nada. Cenamos allí y bastante bien, comida casera excepto los postres, y muy barata. El desayuno correcto: tostada, zumo natural, café y magdalena.
El hotel está apartado del pueblo pero en una zona muy bonita en plena naturaleza. La finca tiene varios tipos de árboles frutales, y una terraza muy chula para épocas más calurosas. Situación muy buena para hacer rutas de senderismo y visitar los pueblos cercanos de Candeleda y Arenas De San Pedro.
El GPS no está muy acertado, porque para llegar hay que meterse por un camino de tierra, pero en buen estado.
Los dueños muy amables en todo momento.